Inauguran exposición en la Casa Azul
Las apariencias engañan incluye sus objetos personales hallados en un baño del inmueble
Sábado 24 de noviembre de 2012, p. 6
La ropa de Frida, corsés, un barniz de uñas, unos lentes oscuros, sus zapatos, perfumes, la prótesis que se le colocó después de la amputación de la pierna en 1953... apenas una pequeña parte de lo que en 2004 se encontró en un baño de la Casa Azul, cerrado durante cinco décadas por órdenes de Diego Rivera. Así se conforma la exposición Las apariencias engañan: los vestidos de Frida Kahlo, que hoy se abre al público en el Museo Frida Kahlo.
La muestra tiene varios ejes. Así, el visitante podrá ver la construcción de la identidad de la artista a partir de dos de los sucesos que marcaron su vida: cuando a los seis años de edad contrajo polio, y el accidente que tuvo a los 18 años, que le causó numerosas heridas, y cómo su estilo particular inspiró a diseñadores de moda.
Esa construcción de identidad no era simplemente para mostrar su mexicanidad o sus ideas políticas, su forma de vestir estaba también encaminada a cubrir sus imperfecciones, señaló durante el recorrido que se ofreció a los medios de comunicación este miércoles la curadora Circe Henestrosa.
Se explica de esta forma el por qué usaba faldas largas, la ropa de tehuana que, aunque algunos especialistas sostienen que era para complacer a Diego, lo cierto es que una fotografía familiar demuestra que lo hacía desde antes de conocerlo
, añadió Henestrosa.
La muestra está en cinco salas del área de exposiciones temporales: la primera es una introducción al estilo de Frida, y la museografía recuerda el baño donde se localizaron las ropas y otros enseres de uso personal. La segunda es cómo fue desarrollando su estilo de vestir y se presentan nueve atuendos originales, entre ellos el que utilizó para la sesión de fotografías que la llevó a la portada de Vogue en 1937. Se cambiarán cada cinco meses, para mostrar más cosas y que el visitante asiduo al recinto pueda ver objetos diferentes.
La tercera sala es una vitrina con varios anaqueles, en los que se exhiben blusas, joyería y accesorios con los que la artista adornaba la parte superior del torso. En la cuarta se muestra el corsé como elemento de inspiración para diseñadores de moda, como Jean Paul Gaultier, Dai Rees y Rei Kawabuko, y en el quinto espacio, acompañado por el cuadro que dio origen a la exposición, titulado Las apariencias engañan, se presentan tres piezas de la colección de alta costura que Riccardo Tisci realizó para Givenchy en la temporada otoño-invierno 2010, inspirados completamente en Kahlo.
Se preparó además la Sala Vogue, donde diseñadores internacionales harán sus interpretaciones de diseñadores de renombre; los dos primeros son de Jason Wu y Costume National.
El concepto de la exposición corrió a cargo de inglesa Judith Clark, y la restauración de las piezas fue realizada por Renato Camarillo. Los maniquíes donde se colocaron los vestidos llevan tocados creados por Angelo Seminara e inspirados en elementos de la obra y vida de la artista.
Las apariencias engañan... permanecerá un año en el Museo Frida Kahlo (Londres 247, Coyoacán). Este sábado, a las 13 horas, se efectuará la conferencia El origen y la producción de Las apariencias engañan... con la participación de Circe Henestrosa y la directora del museo, Hilda Trujillo.