Martes 20 de noviembre de 2012, p. 36
Con instalaciones únicas en su tipo, pues cuenta con una cámara anecoica –que permite aislarse del ruido exterior— el Laboratorio de Compatibilidad Electromagnética (LCE) de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (Esime) no puede funcionar a su máxima capacidad por falta de equipamiento e insumos.
Roberto Linares, responsable del LCE, experto en electrónica y comunicación, destacó que en sus instalaciones, en las que se han invertido 8 millones de pesos, es posible realizar pruebas de calidad de cualquier equipo electrónico para saber si cumple con las normas internacionales, como ocurre con los teléfonos celulares. Sin embargo, a más de un año del inicio de operaciones, reconoció que “no lo tenemos totalmente en funcionamiento, porque nos hacen falta aditamentos, como una mesa circular –para colocar los equipos que serán analizados—, y un cuarto blindado, entre otras cosas”.
El proyecto dio inicio como una iniciativa global, pero se ha ido armando poco a poco, por lo que aún tenemos un manejo manual del equipo. La entrada y salida de la cámara podría realizarse de forma automatizada. Es algo que estamos tratando de resolver. Hay equipos más nuevos, pero trabajamos con otros que son de hace 30 años
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El investigador estimó que contar con los equipos e insumos necesarios requeriría una inversión de al menos un millón de dólares, pues estos laboratorios sólo se han instalado en la iniciativa privada, y podría ser el primero en funcionamiento en una institución pública
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Agregó que en México no se fabrica gran parte de los sistemas electrónicos que usamos y verificar que cumplan con la norma internacional requiere de instalaciones tan especializadas como ésta, pues trabajamos frente a condiciones de mercado donde cada una de estas pruebas tiene un costo de 3 mil dólares
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