Para 2013, el Instituto Federal Electoral (IFE) enfrentará, de nueva cuenta, la caducidad de millones de credenciales que ya no podrán ser utilizadas en los próximos comicios federales: 6.5 millones de documentos de elector 09, que acorde con la legislación ya no serán válidas y deberán ser renovadas.

El desafío, según la Comisión del Registro Federal de Electores (RFE), es empatar esta renovación con la incorporación de las nuevas características del documento. El consejero electoral Benito Nacif señaló que este proceso implica que se incluirán mayores candados de seguridad, entre ellos, las diez huellas dactilares del elector. Para el efecto, dijo, tendremos que adquirir más equipos sensores deca dactilares.

Por ahora, el RFE se aboca a buscar acuerdos entre los partidos políticos para que respalden las modificaciones que se pretenden introducir, entre ellas, el encriptamiento de las referencias a la dirección para tratar de hacerlo compatible con las nuevas disposiciones en materia de protección de datos personales. En el proyecto, que aún deberá analizarse con los partidos, se pretende que la dirección se pueda ver mediante un dispositivo que tienen los teléfonos celulares para dar lectura a los signos que en su caso, aparecerían en lugar de la referencia explícita del domicilio.

Para ello habrán de realizarse reuniones de la Comisión Nacional de Vigilancia del RFE, integrada por representantes de los partidos políticos, a fin de escuchar sus posturas y lograr acercamientos en las posiciones en torno a cambios en la credencial de elector que después se validarían al aprobarse en el seno del Consejo General del IFE.

La renovación de las credenciales 09, dijo Nacif, enfrentará el dilema de que el próximo año, la mitad del país irá de nueva cuenta a elecciones locales, con las restricciones que esto implica para la renovación y, al mismo tiempo, garantizar el derecho al voto a los ciudadanos en elecciones locales.

Explicó que se pretende hacer el mismo procedimiento que se efectuó en 2011 con las credenciales 03 –las que tenían en el reverso hasta las elecciones de 2003 para marcar el ejercicio del voto–, mediante una orden de que estos documentos ya no serán válidos a partir de una fecha que fije el Consejo General del IFE, no sólo para votar, sino también para identificarse.

Sin embargo, en el seno de la comisión del RFE se analiza el esquema de campaña publicitaria, porque las credenciales 09 tienen un mayor grado de complejidad, ya que existen 3 tipos y solamente en un caso –con 6.5 millones de documentos– caducan acorde con las disposiciones de la legislación electoral. Se buscará no generar confusiones entre los electores y dirigir la campaña hacia quienes realmente están en la necesidad de actualizarla.

El consejero explicó que cuando se realizó el proceso de dar de baja las credenciales de elector, ocurrió una sensible baja en la cobertura del padrón en 2011; sin embargo, para 2012, estas variaciones ya se habían recuperado y para las elecciones federales se tenía el listado nominal más grande de la historia.

Por otro lado, explicó que el IFE pretende difundir entre las diferentes dependencias e instituciones que utilizan la credencial de elector como forma de identificación, el uso intensivo de la página de Internet para verificar la autenticidad de los documentos que se les presentan. Es decir, ya es posible que una institución pueda, a partir de algunos datos extraídos de la credencial, contrastarlos con el padrón electoral del IFE para verificar que lo que se presenta es auténtico.