Destaca el presidente Santos en la ONU las próximas negociaciones de paz con las FARC
Jueves 27 de septiembre de 2012, p. 27
Bogotá, 26 de septiembre. Los grupos paramilitares colombianos, que se desmovilizaron entre 2003 y 2006, han confesado ante la justicia delitos como homicidio, desaparición forzada y desplazamiento de personas que dejaron más de 50 mil víctimas, según un reporte de la fiscalía general dado a conocer hoy por la cadena de radio RCN.
El informe indica que la admisión de los delitos por ex integrantes de las bandas de extrema derecha menciona en total a 50 mil 509 víctimas en el país, cuya política de confesiones se inscribe en un contexto para la obtención de beneficios judiciales.
Entre los casos referidos por los delincuentes en las indagatorias se encuentran 25 mil 83 asesinatos, 10 mil 925 casos de desplazamiento de personas, 3 mil 459 de desapariciones forzadas y el reclutamiento de mil 589 personas por las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), citó la emisora.
El reporte de la fiscalía agrega que desde que los ex integrantes de las AUC comenzaron a entregar información sobre fosas clandestinas las autoridades han encontrado 4 mil 792 cadáveres, 738 de ellos sin identificar por las autoridades forenses, en hallazgos en su mayoría en los departamentos de Antioquia, Magdalena, Meta, Putumayo, Santander y Norte de Santander.
El director del Instituto de Medicina Legal, Carlos Valdés, indicó que se calcula que alrededor de 50 mil cuerpos de víctimas de los grupos paramilitares permanecen enterrados en fosas comunes. La fiscalía ha llamado a juicio a mil 126 personas vinculadas con desapariciones forzadas o con algún nexo con grupos paramilitares y solamente 14 han sido condenadas.
Las AUC reunieron a varios grupos paramilitares que se crearon en los años 80 con financiamiento de terratenientes y narcotraficantes con la supuesta intención de combatir a la guerrilla, aunque terminaron involucrados en negocios de tráfico de drogas y cometieron múltiples delitos de lesa humanidad contra sectores campesinos.
Dichos grupos se desmovilizaron entre 2003 y 2006 acorde con un proceso de diálogo con el gobierno del entonces presidente Álvaro Uribe (2002-2010), que pidió al Congreso aprobar una legislación mediante la cual los paramilitares no pueden recibir penas superiores a ocho años de prisión.
Según la administración de Uribe, unos 32 mil integrantes de esa organización se desmovilizaron.
Mientras tanto, Uribe anunció este miércoles que demandará a los ex congresistas Eleonora Pineda y Miguel de la Espriella, quienes denunciaron el apoyo de los grupos paramilitares a su campaña política en 2002.
En Nueva York, el presidente colombiano Juan Manuel Santos presentó ante la Asamblea General de la ONU el nuevo y especial momento
que vive su país con el inicio el 8 de octubre en Noruega de las conversaciones de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y dijo confiar en regresar el próximo año con un acuerdo.
Santos agradeció a la comunidad internacional por su apoyo y en especial a Noruega y Cuba, donde proseguirán las pláticas de paz, así como el acompañamiento
de Venezuela y Chile.
Por último, el líder de las FARC Rodrigo Londoño (Timochenko) rechazó que hayan aceptado dialogar con el gobierno por temor a la muerte, sino por amor a la vida
. Señaló que luchan por cambios, justicia y patria para todos
.