Miércoles 19 de septiembre de 2012, p. 40
Dubai. Irán envió ayer un submarino y un destructor al golfo Pérsico desde el puerto de Bandar Abbas, mientras barcos de Estados Unidos y aliados realizaban ejercicios en la región a fin de prepararse para mantener abiertas las rutas de crudo. Irán ha amenazado con cerrar el estrecho de Ormuz, una ruta clave para las exportaciones de petróleo desde el Pérsico, si sus instalaciones nucleares son atacadas por Israel, que sospecha que Irán desarrolla una bomba atómica. Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y naciones de Medio Oriente realizan un ejercicio naval enfocados en el retiro de minas que Irán y grupos rebeldes podrían diseminar para interrumpir el tráfico de tanqueros petroleros.