Los historiadores Francisco Pérez Arce Ibarra, Pedro Salmerón, Catherine Andrews, y la investigadora Tania Hernández Vicencio, quienes participaron en la mesa redonda La disputa por la historia, realizada en Casa Lamm, coincidieron en señalar que no existe una interpretación pura de los hechos, sino distintas visiones.

Manifestaron que comprender el pasado, como un proceso es el objetivo de los historiadores, quienes pueden tener diferentes puntos de vista de acuerdo con su presente y su cultura para ofrecer un panorama del acontecimiento en cuestión.

El historiador no busca transformar sino entender; interpreta a partir de su punto de vista. Él piensa, investiga y comprende los procesos que llevaron a que las personas actuaran como lo hicieron, explicó Andrews.

En el foro México después del 2 de julio y el mundo actual, auspiciado por La Jornada y Casa Lamm, el tema de la historia causó discusión sobre si esa disciplina permite justificar y legitimar al gobierno en turno, así como escudriñar quiénes son héroes y quiénes son vendedores de la patria.

Galería de héroes y fechas

En este debate de ideas, Pérez Arce sostuvo que en el siglo XX se construyó lo que se llama la historia de bronce, en la que se creó una galería de héroes y listado de fechas históricas. Se refirió al sexenio de Carlos Salinas de Gortari, cuando se intentó cambiar los libros de historia para incluir el Tratado de Libre Comercio.

Expresó que en esta disputa por la historia, los movimientos sociales también luchan y reivindican una forma de ver su pasado.

“La sociedad movilizada –aseveró el historiador– necesita un referente y busca episodios en los cuales reconocerse, necesita saberse en el eslabón nuevo de una historia acumulable. Recordar es algo así como sinónimo de despertar. Cuando se dice que la sociedad ha despertado, significa que ha reconocido la realidad, ha tomado conciencia de una realidad.

La sociedad o un grupo social cuando despierta busca referencias que le digan dónde está, quién es, necesita recordar, revalorar lo que estaba en su memoria.

Francisco Pérez Arce también abordó la gesta estudiantil del 68, el levantamiento zapatista de 1994 y el movimiento #YoSoy132, como, apuntó, los tres momentos estelares en la disputa por la historia.

Tania Hernández Vicencio, autora del libro Tras las huellas de la derecha (el Partido Acción Nacional, 1939-2000), hizo un recuento de cómo el gobierno ha modificado la Constitución en torno a los derechos humanos, la libertad de culto y la permanencia del catolicismo liberal.

A la historiadora Andrews le pareció vacía la discusión de la disputa por la historia, pues consideró que los investigadores tienen puntos de vista diferentes y no pueden juzgar a los antepasados.

Pedro Salmerón manifestó su rechazo a la idea de que México es un país derrotado y explicó que el tema de la historia siempre estará en debate.