El jefe del Ejecutivo federal, Felipe Calderón, se reunió ayer con el presidente electo, Enrique Peña Nieto, para entregarle un diagnóstico sobre el problema de la inseguridad y hacer un recuento de los alcances de la estrategia seguida por su gobierno en esta materia.

La junta se realizó en Los Pinos por la mañana, y tanto el priísta como el panista se hicieron acompañar los colaboradores que trabajan específicamente en el tema de la seguridad.

De esta manera, Peña Nieto llegó con Miguel Ángel Osorio, coordinador general de política y seguridad de su equipo de transición; Jorge Carlos Ramírez Marín, vicecoordinador de seguridad y justicia, y Roberto Campa, coordinador en esa materia.

Por su lado, Calderón Hinojosa estuvo secundado por todos los integrantes del gabinete de seguridad, entre los que se encuentran los secretarios de Gobernación, Alejandro Poiré Romero; de la Defensa Nacional, Guillermo Galván Galván; de Marina, Mariano Francisco Saynez Mendoza; de Seguridad Pública, Genaro García Luna; de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade Kuribreña, y la procuradora general de la República, Marisela Morales.

Este es el segundo encuentro que mantienen el mandatario y el presidente electo durante este mes. El primero fue el pasado 5 de septiembre, con el fin de iniciar el proceso de transición entre ambos gobiernos.

Por la tarde, la Presidencia de la República dio a conocer un comunicado en el que informa que Calderón y Peña intercambiaron puntos de vista sobre los avances y retos en materia de seguridad. El primero hizo un recuento de los alcances de la estrategia seguida en este aspecto y reiteró su reconocimiento al esfuerzo realizado por las fuerzas armadas federales en la construcción de un México seguro.

También ratificó su disposición y la voluntad de su gobierno de mantener un proceso de transición ordenado y transparente, por lo que instruyó a su gabinete a mantener reuniones periódicas con el fin de colaborar en el intercambio de información.

Según información de Los Pinos, Peña agradeció a Calderón y al gabinete su disposición para compartir información y diagnósticos que permitan durante el periodo de transición gubernamental, así como como una vez que asuma el cargo, tomar decisiones en un tema tan sensible e importante para los mexicanos.