ecididamente, la noción de año de Hidalgo ha sido rebasada en México, y en especial en Pemex y en la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Ya los funcionarios debían estar preparando su salida de sus oficinas, ya que faltan poco más de tres meses para el fin del sexenio. Pero siguen ávidos fabricando
nuevos negocios (para sus bolsillos, claro) y vendiendo lo que todavía se pueda del país. El saqueo se da en períodos más cortos.
Hacia el cuarto y último trimestre de este año, Petróleos Mexicanos (Pemex) anuncia que lanzará una convocatoria pública internacional para licitar 10 áreas en Chicontepec. La paraestatal recurrirá a la figura de contratos integrales para permitir la entrada de recursos privados en la explotación de estos nuevos bloques.
Las superficies del también llamado Proyecto Aceite Terciario del Golfo (PATG) tendrán una superficie de alrededor de 100 kilómetros cuadrados cada uno. Les encanta repartir fragmentos de la Nación. Pemex presume que Chicontepec produce 65 mil barriles diarios, alrededor de 3 por ciento de la producción nacional. Se le asignó un presupuesto para 2012 de 18 mil 322 millones de pesos. Su producción de gas natural asociado fue, de enero a mayo de este año, de 146 millones de pies cúbicos diarios.
Para comparar, el presupuesto para 2012 de Litoral de Tabasco, fue de 7 mil 625 millones de pesos, o sea que se gasta, si no le dan de más como en años anteriores, 2.4 veces más en Chicontepec que en Litoral. Pero en éste la producción de crudo en el mismo lapso fue de 322 mil barriles diarios, casi 5 veces más que en Chicontepec. Y la producción de gas natural en Litoral fue de 718 millones de pies cúbicos diarios, también 5 veces más que en Chicontepec. Quieren los funcionarios seguir pagando más del doble, por una producción de sólo una quinta parte. ¿Por qué?
Porque Litoral sigue siendo de Pemex. Meten contratistas donde pueden, pero sigue habiendo equipos de perforación, ingenieros, técnicos y demás, de Pemex. Lo que ellos quieren son las mordidas y la entrega del país. Como vemos, ya no es sólo año de Hidalgo: en este caso es sólo el último trimestre.
Por si fuera poco, ya tienen para rifa o concurso la entrega de siete bloques de unos mil kilómetros cuadrados cada uno, para 2013, en las aguas profundas. Ya ni van a estar (por lo menos ya no deben estar, ya habrá terminado el sexenio) y siguen entregando. Ahí, la producción de petróleo es nula, y de gas puede ser que haya algo de producción en unos años, pero carísima. No es que, en realidad, quieran producir una pizca de gas, que bien que lo queman, sino quieren contratos y negocios.
Vamos a ver un ejemplo con la CFE, del que ya hemos hablado: importación, a lo loco, de gas natural de Estados Unidos en una masa de gasoductos, en vez de las plantas eléctricas existentes o por construir de otras fuentes (incluso geotérmicas, que no requieren combustibles).
Sólo nos referimos a meses del año de Hidalgo. Gasoducto de la frontera de Chihuahua con Estados Unidos a El Encino, 385 kilómetros, efectuado y adjudicado el concurso el 3 de enero de 2012.
Gasoducto Sásabe (en la frontera) a Puerto Libertad (en la costa del Pacífico de Sonora), publicación de la convocatoria del concurso, el pasado 15 de marzo, debe firmarse el contrato el 10 de septiembre próximo.
Gasoducto Puerto Libertad a Guaymas y a Topolobampo, publicación de la convocatoria del concurso, 15 de marzo, firma del contrato, 16 de octubre de 2012.
Gasoducto El Encino-Jiménez-Topolobampo. Publicación de la convocatoria del concurso, 15 de marzo. Firma de contrato, a partir del 4 de octubre de 2012.
Gasoducto Topolobampo-Mazatlán. Publicación de la convocatoria del concurso, 15 de marzo. Fallo del concurso, 30 de noviembre de 2012. Firma del contrato, 10 de diciembre de 2012.
Cada contrato implica las obligadas mordidas. Si no, ¿por qué tanta prisa por entregar al país?
A los funcionarios de Pemex les gustó el negocito de importar gas de Estados Unidos. En el Consejo de Administración se aprobó, en su pasada reunión, el Plan de Negocios 2013-2017 (¡a poco se van a quedar!) que concreta la ruta a seguir para la internacionalización de la petrolera, así como una estrategia de gas con la que se aumentará la importación desde Estados Unidos.
Se abrirán al menos ocho canales para que este año Pemex suba drásticamente la compra de gas a Estados Unidos. La paraestatal no va a usar el gas como la CFE, sino que lo revendería en el mercado interno. Para lo que sea negocio, cualquier pretexto es bueno.
Insistimos como final: Ya no es año de Hidalgo, sino meses de saqueo. Y hasta se quieren trepar a 2013 y siguientes.