Asunción, 19 de julio. Al término de la visita de una misión del Parlamento Europeo, que instó a fomentar el diálogo y mantener la paz social en Paraguay hasta las elecciones de abril de 2013, la eurodiputada española Ana Miranda afirmó en esta capital que el juicio político y la destitución del presidente paraguayo Fernando Lugo constituyeron un golpe parlamentario encubierto.

Miranda formó parte de la delegación de eurodiputados que durante tres días analizó la situación del país, para lo cual se entrevistó con sectores oficiales y organizaciones políticas y sociales.

Perteneciente al grupo parlamentario Los Verdes-Alianza Libre Europea, Miranda dijo que suscribió desde el primer momento, con otros 40 colegas, un documento desconociendo al gobierno de Federico Franco, designado por el Congreso tras lo que calificó la expulsión de Lugo de su cargo, el 22 de junio.

A su juicio, esos acontecimientos afectaron la democracia en Paraguay y motivó a su grupo a proponer en el plenario del órgano legislativo una declaración de respaldo al mandatario destituido y a su gobierno.

Asimismo, destacó que a su grupo político le preocupa el daño causado a la imagen internacional de Paraguay por esa ruptura del orden institucional y social.

Miranda apuntó que durante esta visita, como miembro de la comisión del Parlamento Europeo, pudo palpar el apoyo solidario de la población hacia su legítimo Ejecutivo y el rechazo a la violación de las normas procesales durante el juicio seguido contra el presidente electo.

Finalmente, fustigó la falta de pruebas en el juicio seguido a Lugo, la inexistencia de una propuesta política para la nación por quienes ocupan el poder y la necesidad de alcanzar reconocimiento internacional mediante unos comicios libres.

El vocero de la misión, Luis Yañez, lamentó a nombre del grupo que un presidente no haya podido terminar su mandato constitucional, si bien no emitió ningún juicio sobre el proceso de destitución de Lugo.

Precisó que la misión no tuvo como objetivo actuar como un tribunal que tiene la obligación de dictar una sentencia. Eso le corresponde a los paraguayos.

Por medio de un comunicado, los europarlamentarios expresaron su apoyo al pueblo paraguayo y llamaron a que todas las partes colaboren con vistas a que el periodo de transición hasta las próximas elecciones se desarrolle en un marco de paz social, respeto de los derechos humanos y transparencia.

En tanto, Federico Franco negó ser un representante de los intereses de los grandes terratenientes y de la élite económica, y sostuvo que los problemas sociales, sobre todo los de los labriegos sin tierra, será “prioridad absoluta de su gobierno.

La prioridad absoluta serán los problemas sociales, y sobretodo los sin tierra, pero entiendan que ha de haber orden y respeto. Dentro de la ley, todo. Fuera de la ley, nada, afirmó en entrevista al diario brasileño Folha de Sao Paulo.