Quienes tienen maletas llenas de dinero, dónenlo a la Cruz Roja
Lunes 18 de junio de 2012, p. 7
Mérida, Yuc., 17 de junio. Dos semanas antes de la elección, Andrés Manuel López Obrador convocó a quienes buscan comprar el voto con maletas de dinero
a que las guarden y pasados los comicios las entreguen a alguna institución de beneficencia y les vamos a organizar un homenaje
.
En su gira por Quintana Roo y Yucatán, ambos gobernados por el PRI, el candidato presidencial del Movimiento Progresista planteó que como no funcionó el plan de impulsar a Enrique Peña Nieto mediante las televisoras, gracias al movimiento juvenil, ni la guerra sucia en su contra, ahora quieren comprar el voto. Por eso aconsejó a los ciudadanos no hipotecar su futuro.
Acompañado en Quintana Roo por Porfirio Muñoz Ledo en el Parque de los Niños –que lució lleno–, reiteró su crítica a la cobertura televisiva de su campaña: Todavía no panean las cámaras, nada más me toman los zapatos (risas), los pies son los que salen. A (Enrique) Peña lo sacan con toda la gente. Usan las cámaras de ojo de pescado. Ojo de ballenaaaa. Y acá ni un paneo. No le hace, la verdad siempre se abre paso
.
Antes, en Mérida, prometió hacer en seis años lo que haría en 12, porque “no me voy a relegir, no creo en la relección. Me dicen algunos: ‘es que no va a alcanzar el tiempo’; no, sí va a alcanzar, porque no voy a trabajar ocho horas diarias, voy a trabajar 16, 18 horas”.
De primera a clase turista
Al subir al avión rumbo a la capital yucateca, López Obrador se sorprendió porque tenía lugar en primera clase. Entonces, se lo cambió a un reportero gráfico para sentarse en la sección económica al lado del dirigente del PRD, Jesús Zambrano.
En cuestión de minutos, el piloto del vuelo de Aeroméxico, capitán Javier Mota, fue a saludarlo y pedirle que aceptara estar en primera clase. Pásate, por favor, yo te asigné el lugar
.
El abanderado presidencial insistió en que no podía hacerlo y Zambrano le hizo ver al jefe de la tripulación que el perredista es congruente con su discurso de austeridad. Sin estar muy convencido, el piloto regresó a la cabina, donde López Obrador acudió al aterrizar en Mérida para recompensar la deferencia: ¡Se ve que sí hay capitán!
, exclamó. Luego, los dos posaron para una fotografía, como también lo hicieron varios pasajeros.
En el aeropuerto decenas de yucatecos lo recibieron con porras de ¡Ya llegó, ya está aquí, el que va a chingar al PRI
. Un grupo de jóvenes del trío Romance lo escoltó a la camioneta entonando: Es un buen tipo mi viejo... ahooora ya camina lento
.
–¿Ya lo ven viejo?, –les preguntó un reportero.
–Es por el Día del Padre y él es papá –respondió el guitarrista.
Antes del arribo del candidato a la plaza La Mejorada se dio una rebatiña entre 12 personas que querían gorras rojas del Partido del Trabajo. Un señor de baja estatura no sabía cómo resguardarlas y trataba de apretarlas en una bolsa de plástico, pero la gente lograba arrebatarle algunas. ¡Si son para repartir!
, gritaban. Al final entregó las cachuchas a una mujer que logró escabullirse del gentío.
Alrededor se paseaba un hombre con pancarta en mano que decía: Si te condicionan tu voto a cambio de cuchi cuchi denúncialo ante la Fepade
, en alusión al consejo de Josefina Vázquez Mota (PAN) para llevar a los maridos a votar. El tabasqueño pidió a cientos de yucatecos reunidos en el mitin dar el último jalón
. La respuesta fue: ¡No estás solo!
López Obrador presumió que tiene el voto del norte y ya ni hablar
del sur y del centro. Este arroz ya se coció
. Los asistentes le contestaron: ¡presidente, presidente!
Cuando definió a su contricante del PRI como producto chatarra, se escuchó ¡Fuera Peña, fuera Peña!
, que tanto corea el movimiento juvenil #YoSoy132, al que, por cierto, López Obrador reivindicó con la frase: ¡Qué vivan los jóvenes!
Con una metáfora de su deporte predilecto los convocó a cuidar las casillas y estar fildeando, como en el beisbol
.
Recordó que en dos semanas ha recorrido 16 estados a ras de tierra
. Luego viajó a Cancún por carretera durante cuatro horas. En las dos plazas habló con el sol a plomo y sin lona que protegiera el templete.
En el Parque de los Niños fue recibido a ritmo de batucada. Ahí, la candidata al Senado Luz María Beristáin declaró que en nombre de un grupo de jóvenes le entregaba una pancarta con la frase: Los estudiantes son de izquierda
. Un chavo levantaba otra entre la multitud, que señalaba: Yo sigo propuestas, no partidos políticos. AMLO 2012
y otros más coreaban: No nos falles
. Con su triunfo, el perredista advirtió que Jorge Emilio González, El Niño Verde, y Elba Esther Gordillo, se van a quedar con las ganas
de ocupar puestos.