Con la destrucción de la base de datos del Registro Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (Renaut), el Registro Federal de Electores persiste como el listado de datos personales más amplio del país, de ahí que la credencial para votar es la identificación oficial más requerida.

Luego de tres años de recabar información de 98.4 millones de teléfonos celulares y sus portadores, los legisladores derogaron el marco que dio origen al Renaut, formado con base en datos personales de la Clave Única de Registro de Población (CURP).

La finalidad era ubicar todos los teléfonos móviles del país y tomar, por ejemplo, esta geolocalización como un elemento en las indagatorias ministeriales.

El 17 de de abril pasado el Congreso de la Unión aprobó un decreto para modificar la Ley Federal de Telecomunicaciones y ordenó dar por concluido el funcionamiento de este registro.

Por ello, tocó a la Secretaría de Gobernación dar cauce –con el apoyo del Instituto Federal de Acceso a la Información y protección de Datos– a la eliminación de 98.4 millones de registros de telefonía móvil. También contaron con la asesoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Así, los recursos, el tiempo y el esfuerzo de entidades gubernamentales y de los propios usuarios para enviar sus datos (la mayoría por mensajes de texto) derivaron en otro proyecto frustrado para integrar una plataforma nacional de datos personales y de teléfonos móviles.

Tocó al subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos de Gobernación, Gustavo Mohar, dar el enter para iniciar esta fase de eliminación de datos, en una creremonia pública para garantizar, se dijo, la veracidad de la destrucción referida.

El titular de Gobernación, Alejandro Poiré, no estuvo presente en el acto; envió un mensaje en el que afirma que los datos del Renaut nunca fueron filtrados o compartidos.

Estos datos estuvieron siempre salvaguardados; en ningún momento tuvieron el riesgo de ser filtrados, utilizados o usados para ningún otro propósito más que para el que fue creado. Con este proceso se tiene la garantía al 100 por ciento de que esta base quedará definitivamente eliminada, dijo.

El titular del Registro Nacional de Población, Alberto Alonso y Coria, mencionó que esta base de casi 100 millones de registros estuvo permanentemente vigilada. En ningún momento fue compartida y por tanto existe la garantía total de que nunca salió de las manos de la Secretaría de Gobernación.

Se garantizó que no sea posible recuperar esa información, con el formateo de los discos, indicó.

El primer dato del Renaut fue recibido por Gobernación el 9 de abril de 2009, y el último el 17 de abril de 2012.

Una vez destruido el Renaut, México regresa al punto inicial de 2008: reconocer la necesidad de integrar una base nacional de datos personales de todos los residentes en México. En ese año también se planteó, como otro elemento coadyuvante para diligencias en torno a la seguridad, la cédula de identidad. Sin embargo, este proyecto tampoco ha tenido el desarrollo esperado.

Alonso y Coria aseguró que el proceso para expedir la cédula de identidad a los menores de 18 años va en curso y, hasta ahora, se tiene un reporte de 4 millones de micas elaboradas. La meta para el término del sexenio es llegar a los siete millones de cédulas, aunque en México hay poco más de 26 millones de menores de entre cuatro y 17 años.