No habrá resultados en temas como medio ambiente y pobreza
El capitalismo industrial que representan, contradictorio con la cumbre
Viernes 15 de junio de 2012, p. 45
Académicos y defensores del medio ambiente de diversos países señalaron que la conferencia de Naciones Unidas Río+20 sobre Desarrollo Sustentable no arrojará resultados, debido a que el sistema económico actual es contradictorio con el cuidado ambiental y la erradicación de la pobreza.
Personalidades como Michael Löwy, Hugo Blanco, Leigh Brownhill, Klaus Engert, Samuel González Contreras, Ana Isla, Wahu Kaara, Joel Kovel, entre otros, agrupados en la Red Ecosocialista Internacional, difundieron un pronunciamiento sobre esta reunión, en la que participarán representantes gubernamentales y que se efectuará del 20 a 22 de junio en Brasil.
La falta de resultados sólo se debe a la mentalidad estrecha, la avaricia, la corrupción, la ignorancia y el egoísmo de la mayoría de los gobiernos que estarán presentes y de las compañías multinacionales que patrocinan la cumbre, sino a un factor mucho más decisivo: ellos representan los intereses de un sistema social y económico, el capitalismo industrial moderno, que es fundamentalmente contradictorio con los supuestos intereses, propósitos u objetivos de la misma cumbre: erradicar la pobreza y proteger el medio ambiente.
En una misiva, los expertos agregan que la llamada economía verde
–principal propuesta del Draft Cero, elaborado por los organizadores de la cumbre– no es más que una versión pintada de verde
del business as usual (los negocios habituales). “Una hoja de higo para esconder la horripilante desnudez de la actual economía capitalista de mercado, que no puede funcionar sin destruir el medio ambiente, creando monstruosas desigualdades sociales y avanzando con gran velocidad hacia un desastre ecológico de proporciones nunca antes vistas, provocado por el calentamiento global y el resultante caos climático.
“Como ecosocialistas creemos que la humanidad necesita alternativas radicales, es decir, opciones que se enfrenten con las raíces sistémicas del mal, el paradigma capitalista de la civilización. Necesitamos una nueva manera de vivir, un nuevo modelo, basado en valores de solidaridad y respeto por la Tierra. La única ‘economía verde’ es una que elimine el capitalismo y la mercantilización del agua, la tierra, el aire y la vida; una economía en la que los medios de producción y distribución estén en las manos de la gente que decida democráticamente qué será producido y consumido”. Esta economía, apuntan, debe estar basada en energía solar.
Las semillas para un futuro diferente están presentes en luchas contemporáneas como las resistencias indígenas y campesinas contra multinacionales capitalistas y los agronegocios; en las luchas de las mujeres y en las víctimas de desastres ecológicos.