El titular de la Secretaría de Desarrollo Social, Heriberto Félix Guerra, al comparecer ayer ante la Comisión Permanente aseguró que los programas sociales están blindados para evitar su uso con fines electorales. Resaltó que no hay ni habrá zonas de opacidad ni toleramos ningún acto de impunidad; los programas sociales no son mercancía política ni pertenecen a ningún partido político.

Agregó que si algún servidor público viola la ley, debe dar la cara y advirtió: No meto las manos al fuego por nadie, son miles de funcionarios que manejan los programas sociales.

En su comparecencia, legisladores priístas manifestaron al funcionario que hay dudas, señalamientos y suspicacias en el presupuesto gastado en el primer trimestre en el Programa 70 y más, en el manejo electoral de los programas sociales y en que usted no ha respetado el decreto que aprobó la Cámara de Diputados en el presupuesto.

El diputado Felipe Solís mencionó tres casos específicos de sospechas y de manejos con fines políticos de los programas sociales: Hay una denuncia en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación interpuesta por María Esther Domínguez, quien acusa que en Tamaulipas funcionarios de la Sedeso actuaron en favor del candidato Francisco Javier Cabeza de Vaca para el Senado. Hay un documento plagado de señalamientos de la participación política de funcionarios, y acusó al delegado Luis Alfonso Mejía de abierta participación electoral.

Luego, el priísta citó otro caso: El comité directivo del PAN en Nayarit, que preside Ramón Cabero, dijo que los delegados federales se encuentran participando de manera decisiva en la campaña, sin tomar en cuenta días ni horarios; se trata de ganar, los delegados deben jugársela con nuestros candidatos.

Y refirió un caso más donde el titular regional de Sedeso en el estado de Hidalgo dijo en Tulancingo que hay que tener cuidado para que gane la presidenta (Josefina Vázquez Mota), y si ella gana, el Programa Oportunidades va a continuar por 30 años más.