Zacatecas, Zac., 14 de junio. En el último tramo de su campaña por la Presidencia, el candidato del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, advirtió que a él si le salen las cuentas, y pese a las críticas insistirá en su propuesta de disminuir a la mitad los sueldos que actualmente percibe la alta burocracia y de eliminar derroches y dispendios en el gasto del gobierno federal.

Durante dos reuniones masivas, una en la plaza Bicentenario de esta ciudad zacatecana y otra por la mañana en la plaza de armas de Durango, compartió con miles de simpatizantes la alegría por la respuesta ciudadana.

Afirmó que desde el lunes –en Aguascalientes, Mexicali, Hermosillo, La Paz y Culiacán– ha encontrado plazas llenas y muy llenas, como aquí en Zacatecas.

Afirmó que hay que escuchar al ex presidente Vicente Fox y votar por el puntero, porque, miren las vueltas de la vida, ¡el puntero soy yo!

La multitud reunida en la plaza Bicentenario, ubicada frente al cerro de la Bufa, donde Francisco Villa ganó en la Revolución, gritó en forma repetida y unánime: ¡Presidente, presidente!

Tanto aquí como en la plaza de armas de Durango respondió a quienes han descalificado su propuesta de austeridad republicana, que esa medida, aunada al combate frontal a la corrupción, es el camino para financiar el desarrollo nacional sin sacrificar a las mayorías con mayor carga fiscal, endeudar el país o privatizar Pemex, como pretende Enrique Peña Nieto.

Las personas que aceptaron integrar su gabinete, detalló, entre ellas el ex rector Juan Ramón de la Fuente, están conscientes de que sus ingresos serán 50 por ciento menores de los que ganan los actuales titulares de las dependencias del gobierno federal.

Acompañado por su coordinador de campaña, Ricardo Monreal, y los presidentes de los partidos de la Revolución Democrática, Jesús Zambrano, y del Trabajo, Alberto Anaya, el candidato de la izquierda se refirió a esa propuesta, que ha sido calificada de inviable por el presidente Felipe Calderón, el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, y legisladores y directivos priístas.

Dicen que no es viable, que no les salen las cuentas, pero yo ya las hice, y ¡sí me salen!

Advirtió que ya no habrá sueldos de 600 mil pesos mensuales para funcionarios ni viajes al extranjero, porque se acabará con el turismo político, con las cirugías plásticas a costillas del erario. Tampoco habrá cajas de ahorro especial ni pensiones millonarias para los ex presidentes de la República.

Continuó: no más aviones y helicópteros privados para funcionarios públicos, y ¡ya no habrá cabalgatas donde se gasta mucho dinero nada más para que vengan esos fanfarrones gobernadores a montarse en caballos pura sangre! Eso se va a terminar, porque no puede haber gobierno rico con pueblo pobre.

Expuso que con la eliminación de privilegios y dispendios en el gobierno federal se ahorrarán 300 mil millones de pesos y otros 300 mil millones al erradicar las prácticas de corrupción en la administración pública federal. Son 600 mil millones de pesos del presupuesto público que se destinarán a atender la emergencia en el campo, agregó.

Dijo a duranguenses y zacatecanos que está a días de ganar la Presidencia, y que después de 2006 no claudicó ni pactó con los que se sienten dueños del país.

Adelantó que Ricardo Monreal, quien lo acompañó durante toda la jornada, estará junto a él en su gobierno.