Las administradoras de fondos para el retiro (Afore), a través de las sociedades de inversión especializadas en fondos para el retiro (Siefores), tenían hasta abril pasado más de 321 mil millones de pesos invertidos en acciones de empresas nacionales y extranjeras que cotizan en diversos mercados bursátiles del mundo.

De acuerdo con un reporte de analistas de Banorte-Ixe, los fondos de pensiones mexicanos habían recaudado hasta abril la cifra histórica de un billón 681 mil millones de pesos de las aportaciones de los trabajadores mexicanos para su jubilación. De esa cifra 19.1 por ciento estaban invertidos en el llamado mercado de renta variable y de esto, 11.3 por ciento, es decir casi 190 mil millones de pesos, correspondieron a acciones de empresas extranjeras.

“El balance de las cifras presentadas al cierre de abril nos lleva a estimar que durante el mes los administradores de las Siefores destinaron recursos adicionales a la porción de recursos en renta variable, cerca de 6 por ciento más en el caso de los mercados extranjeros, y aproximadamente 1.4 por ciento en el caso del mercado nacional.

Inversión en el extranjero

La inversión total de las Afore en renta variable tuvo un crecimiento de 4.4 por ciento en abril contra el cierre de marzo y a la vez muestra un crecimiento de 25.6 por ciento en relación con la inversión registrada un año atrás. Nuevamente, la preferencia de los administradores se ha inclinado hacia la inversión foránea, siendo que en este caso el crecimiento para el mes ha sido de 6.7 por ciento, contra 1.3 en el componente de renta variable nacional; de forma anual, la variación es de 33 por ciento más en la parte internacional y de 16 por ciento en nacional, por lo que claramente se observa que la tendencia a preferir el mercado extranjero ha sido una constante en los últimos 12 meses.

Los especialistas de Banorte-Ixe pronosticaron una disminución en los fondos invertidos en la parte extranjera para reducir el riesgo.

Continuamos pensando que las Afore reducirán el nivel de riesgo en sus portafolios debido al sensible aumento del nerviosismo en los mercados, sobre todo por la crisis europea.

Según el reporte de abril pasado de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), los recursos de las pensiones de los trabajadores mexicanos estaban invertidos: 57.8 por ciento, en deuda gubernamental; 17.4 para la adquisición de bonos de deuda privada emitida por empresas mexicanas, 3 por ciento en bonos estructurados y 2.7 por ciento en deuda internacional. En renta variable internacional, 11.3 y en renta variable nacional, 7.9 por ciento.