La Fundación Rosa Luxemburg México, que apoya y fomenta discusiones y debates para que la esfera pública se entienda mucho más allá de lo gubernamental, organizó este miércoles y jueves el ciclo Cine cubano y discusión política.

Participaron Ana Nahmad y Alejandra González Bazúa, del posgrado de estudios latinoamericanos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el documentalista mexicano-guatemalteco, radicado en Cuba, Alejandro Ramírez Anderson.

Patricia Zapata, coordinadora de proyectos de la fundación, señaló que en la actualidad es necesario impulsar propuestas diferentes para descubrir las formas de expresión estéticas en los países latinoamericanos.

La fundación pugna por mostrar que hay diversas formas de participación, que van más allá de lo que ofrecen los marcos institucionales, y encontrar medios acordes a la cultura y condiciones sociales de la diversidad de actores en la sociedad.

Con esa visión se organizaron las mesas de discusión Panorama de las políticas culturales en Cuba: la cultura como expresión política y Nuevas formas de emancipación y construcción de ciudadanía: resistencias y participación a través de la cultura.

De acuerdo con Alejandra González Bazúa existe un dinamismo cultural muy importante en Cuba, pues en contraste con lo que se piensa, hay una gran circulación de ideas, de estéticas, de obras de los creadores. Hay dinámicas que compartimos y están vinculadas con la mundialización del capital, con la memoria socialista en el aquí y en el ahora. Existe una lucha y por eso nosotros decimos hay que mirar a Cuba.

Al respecto, la investigadora Ana Nahmad indicó que en la isla existe una tensión muy fuerte entre lo institucional y lo que se realiza mediante otras vías. Se refirió al caso de espacios dedicados a la oralidad, a la práctica cotidiana callejera que rebasa lo institucional. Por ejemplo, tenemos el hip hop o los pintores callejeros, que utilizan lo institucional pero lo que crean está al margen de las instituciones. La cultura cubana es muy amplia y todo el tiempo está en renovación, agregó Nahmand.

Asimismo, se proyectó el documental de Alejandro Ramírez Anderson sobre Silvio Rodríguez, quien realizó en 1969 un viaje en el barco Playa Girón, de la Flota Cubana de Pesca, en el que compartió su arte durante cuatro meses con los pescadores.

En el filme, el cantautor cubano habla de la realidad de la isla y los contrastes con la actualidad.

Ramírez Anderson explicó que los conciertos de Rodríguez son diferentes, porque no hay publicidad ni grandes escenarios, sólo se convoca a la comunidad.

En Cuba todos los días hay una lucha de ideas, la cultura es un campo de batalla, pero existe un olvido histórico de la isla, comentó Ramírez Anderson.