Mérida, Yuc., 31 de mayo. Al asumir la política como una expresión desgastada, vapuleada y vilipendiada, cuyos alcances y deberes se han distorsionado, Enrique Peña Nieto llamó a escuchar las distintas voces de la sociedad para encontrar coincidencias y lograr el cambio de las instituciones, más allá de los dogmas e ideología de los intereses partidarios.

El candidato del PRI a la Presidencia de la República recibió aquí las conclusiones del foro de la Fundación Colosio sobre El futuro político de México, en cuyos trabajos de discusión se aludió a las manifestaciones de universitarios agrupados en el movimiento #YoSoy132 que, sin embargo, a la hora de la relatoría ya no aparecieron.

Peña Nieto, por su parte, tampoco los mencionó de manera directa, aunque de nuevo habló de su compromiso, si llega a la Presidencia, de respetar plenamente la libertad de manifestación, pues aunque está garantizada en la Constitución, dijo, debe asegurarse para cada ciudadano, permitirle expresarse libremente, decir lo que quiera y ser escuchado por quienes eventualmente seamos responsables de las tareas públicas dentro del Estado mexicano.

Tema debatido

Más tarde, en un par de accidentadas entrevistas al término del foro –había cancelado una conferencia de prensa–, Peña Nieto respondió que no está enterado sobre el planteamiento de los estudiantes para la realización de un tercer debate.

No estoy claro. He confirmado mi participación en el segundo, porque está claramente señalado y se exige al Instituto Federal Electoral realizarlo.

Ante la petición de juicio político en su contra que hizo el movimiento #YoSoy132, Peña Nieto señaló: Son expresiones que respeto, y que se dan en el marco de este México democrático que hoy tenemos y vivimos.

Más tarde, en entrevista realizada en Cancún al término de una reunión con empresarios, el abanderado del tricolor fue cuestionado sobre la petición de los jóvenes de iniciar un juicio político en su contra, a lo que contestó: Creo que ha sido un tema por demás debatido, y que además ya fue revisado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Desde el domingo pasado, cuando en Zacatecas su mitin en la plaza principal fue invadido por la presencia de gigantescas mantas de rechazo al PRI y a su candidatura, desplegadas por jóvenes, el candidato presidencial no ha realizado actos masivos. Interrogado sobre esto en Mérida, reaccionó con extrañeza.

“¡Mañana y todo el fin de semana haré actos masivos! Estos fueron días donde tuvimos otras actividades programadas, pero mañana arrecíamos durísimo. Y vamos a seguir teniendo los eventos. Y obviamente, después del debate, ya estaremos a 17 días de concluir la campaña y evidentemente haré un cierre muy fuerte en varias entidades para cerrar…”

Ante la aparición de nuevas encuestas sobre preferencias electorales, Peña Nieto dijo que, sin duda, estos han sido los comicios donde más sondeos de este tipo se han publicado. No desdeñó ninguno, aunque insistió: En todos vamos adelante.

En algunas encuestas, agregó, no está muy claro quién va en la segunda posición. Cada candidato debe interpretarlas como mejor las considere. El tema, planteó, es que si bien todas son serias y respetables, la real en esta competencia democrática y a la que al final de cuentas todos estaremos sometidos será la del primero de julio.

Más adelante, otra vez ante la prensa, aseguró: Tengo una gran confianza, que no es (estar) confiando; de ninguna manera vamos a caer en triunfalismo anticipado. Tengo confianza en que lograremos la victoria. Estoy trabajando y confío en el proyecto que encabezo.

Al preguntarle si considera haber sido afectado en las preferencias electorales tras la aparición de las manifestaciones estudiantiles, dio una respuesta que se ha vuelto recurrente cuando aborda el tema: “Soy muy respetuoso del movimiento de los jóvenes. He señalado que estas expresiones –las hay a favor y en contra– son parte de la vitalidad de la democracia. Hoy celebro que las estén teniendo de manera señalada los jóvenes”.

Durante su participación ante académicos, politólogos, investigadores y legisladores de su partido, el candidato del PRI había expuesto su idea de hacer más eficaz al Estado mexicano; particularmente se refirió a la relación entre los poderes de la Unión, donde cada uno, “más allá de dogmas, de ideologías y de los intereses partidarios donde tengan la mayor representación, como en el Congreso, pueda lograr la eficacia que esperan los mexicanos.

“Para evitar lo que aquí se mencionaba: el desencanto que hay hoy en la mayoría de los mexicanos por nuestra democracia, y que lo vemos reflejado en las distintas voces que hoy se hacen escuchar, que se alzan y se levantan precisamente ante lo que no observan y que ven varios de quienes representan estas voces (quienes están) frustrados en sus anhelos para construirse un mejor futuro, una historia personal de éxito“, apuntó.

En el capítulo de gobernabilidad y democracia de resultados, presentado por el coordinador de los senadores del PRI y aspirante a una diputación, Manlio Fabio Beltrones, se subrayó el desencanto que existe con la democracia por la falta de resultados, si bien no es ésta sino el sistema lo que está fallando, establecieron los especialistas.

Leídas por el propio Beltrones, otras conclusiones señalan que la sociedad está hastiada de las riñas y desencuentros entre los partidos y los poderes; que la alternancia no ha hecho la transición y que el reto consiste en construir una gobernabilidad democrática y modernizar el presidencialismo mexicano.

Además se discutió sobre cuál debe ser el número indicado de integrantes del Poder Legislativo, siempre bajo el principio de mantener la proporcionalidad de la representación política y de las minorías.

(Con información de Julio César Solís, corresponsal)