La deuda y obligaciones financieras contraídas por los gobiernos estatales y municipales del país alcanzaron el máximo histórico de 396 mil 832.4 millones de pesos al cierre del primer trimestre de este año, lo que representa un aumento de 1.55 por ciento respecto del cierre de 2011, informó la Secretaría de Hacienda.

En su primer reporte sobre la deuda estatal y municipal de este año, la información revela que entre 2007 (primer año de gobierno de Felipe Calderón) y los primeros tres meses de 2012 esos adeudos se incrementaron en 210 mil 362.2 millones, un salto de 112.8 por ciento: pasaron de 186 mil 470 millones a los 396 mil 832.4 millones reportados por la dependencia federal.

Según el reporte de Hacienda la mitad de la deuda estatal y municipal se concentra en cinco entidades. Del total, poco más de 47 por ciento está contratada con instituciones de la banca comercial que opera en el país a una tasa general que al cierre de 2011 (último dato disponible) fue de 6.4 por ciento anual, aunque destacan los casos de Baja California Sur, que tiene contratada su deuda a una tasa ponderada de 7.5 puntos porcentuales, así como Durango y Jalisco, que en ambos casos la tienen en 7.2 por ciento.

Las entidades más endeudadas son: Distrito Federal, con 55 mil 778.3 millones de pesos; estado de México, 38 mil 578.4 millones; Nuevo León, 37 mil 937.9 millones; Coahuila, 36 mil 503.9 millones, mientras que la de Veracruz totalizó 28 mil 122.9 millones de pesos.

Por tipo de acreedores, el Distrito Federal concentra la mayor parte de sus adeudos con la banca de desarrollo; en el caso de Nuevo León se mantiene diversificada entre banca comercial, de desarrollo y colocaciones bursátiles; Coahuila destaca porque 96 por ciento de sus adeudos, 35 mil 139.51 millones, está contratado con la banca comercial, mientras que en Veracruz la banca comercial es acreedora de 42 por ciento de sus compromisos financieros (12 mil 74.4 millones).

Del reporte de la Secretaría de Hacienda se desprende que los gobiernos estatales y municipales prácticamente han empeñado los ingresos que les transfiere la administración pública federal por medio de las participaciones, los cuales quedan en garantía de pago ante los acreedores. De hecho, en una parte del reporte dado a conocer ayer las obligaciones financieras representan 67.3 por ciento de los ingresos por concepto de participaciones federales.