El Distrito Federal tiene un liderazgo importante en el país en proyectos de movilidad urbana, sin embargo la tarea sigue siendo grande y lo importante es que el próximo gobierno no pierda el paso y promueva acciones coordinadas con el estado de México, afirmó Adriana Almeida Lobo, directora Ejecutiva del Centro de Transporte Sustentable (CTS México).

Entrevistada durante el Congreso Internacional de Transporte, organizado por la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad en el Parque Bicentenario, advirtió que la falta de una política pública de movilidad nacional limita el ritmo de desarrollo de proyectos, no sólo para la capital del país, sino para los estados y los municipios.

Almeida Lobo, consultora con experiencia en proyectos de transporte urbano y regional, colaboró con el gobierno de la ciudad de México en el desarrollo del Metrobús, consideró que la expansión de la red de este sistema de transporte no va al ritmo que se esperaba (de 10 corredores que propuso construir esta administración se hicieron 3 y la ampliación del primero) pero insistió en que lo importante es mantener el paso.

Por la tarde, el director técnico operativo del Metrobús, Jorge Coxtinica Aguilar, expuso aspectos sobre el diseño y operación del sistema. Resaltó que la red cuenta actualmente con 95 kilómetros de vialidades confinadas y un parque vehícular de 350 autobuses en los que se transporta en día hábil a 760 mil pasajeros.

Comentó que entre los problemas que ha enfrentado este medio de transporte es la resistencia al cambio, no sólo de los prestadores del servicio concesionado, sino de la gente que vive por donde se han construido los corredores, donde el principal reparo de los comités vecinales es que donde se pone una estación va a proliferar el comercio informal.

Cuando uno plantea los beneficios se empiezan a reducir las resistencias, pero advirtió que no falta tampoco el componente político.

Adriana Almeida participó en el panel sobre desarrollo de infraestructura para el transporte, con la ponencia Acuerdo para la movilidad urbana, advirtió que a diferencia de la ciudad de México, donde este tema sí es una prioridad, debido a los problemas que enfrenta, no está en la agenda del gobierno federal ni de la mayoría de las entidades y los municipios a pesar de que se está registrando una acelerada expansión de la población urbana y de mantenerse el patrón de crecimiento del parque vehícular, para 2030 habrá en el país casi 70 millones de vehículos.

Planteó la necesidad de que el derecho a la movilidad urbana sea elevado a rango constitucional como ya lo es en países como España, Colombia y Brasil, y se instituya una secretaría o un instituto de desarrollo de vivienda y movilidad urbana. Recordó que este problema se vincula con una alta mortalidad por enfermedades asociadas a la contaminación ambiental y por accidentes de tránsito, donde 51 por ciento de las víctimas son peatones.