Kabul, 20 de abril. Un helicóptero de las tropas de Estados Unidos al servicio de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF, por sus siglas en inglés), bajo mando de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), se estrelló en la conflictiva provincia sureña afgana de Helmand, con saldo de al menos cuatro militares estadunidenses muertos. Las autoridades castrenses invasoras señalaron que el percance fue ocasionado por el mal tiempo, pero insurgentes talibanes se adjudicaron el derribo.

El aparato, un Black Hawk, sobrevolaba el área de Lakani, en el distrito de Garmsir el jueves, para recoger y trasladar heridos de un ataque de la resistencia afgana. Los insurgentes asaltaron una comisaría gubernamental en la región y ocasionaron cuatro muertos y siete heridos a la policía afgana.

A un segundo helicóptero que acompañaba al derribado no le ocurrió nada.

El aparato cayó cerca de la sede del Comando Regional del Suroeste, que agrupa a las provincias de Nimruz y Helmand, donde están desplegados cerca de 20 mil militares del Pentágono.

Un vocero del ejército de Estados Unidos no identificado por CNN explicó que el aparato se estrelló debido al mal tiempo, aunque puntualizó: No podemos descartar todavía una acción enemiga.

Por su parte, los talibanes aseguraron que dispararon contra el helicóptero en la provincia de Helmand. Los insurgentes informaron en su página de Internet que el aparato volaba muy bajo para recoger a soldados heridos y muertos, cuando fue atacado. Ningún tripulante sobrevivió, agregaron.

Ayer (jueves), combatientes talibanes derribaron un helicóptero y mataron a sus tripulantes cerca de Garmsir, en la sureña provincia de Helmand, según un escrito de los insurgentes, indicó CNN en su edición digital.

Fuentes de la OTAN comentaron que fue localizado el lugar del accidente, donde instalaron un perímetro de seguridad. La ISAF no ofreció más detalles.

La caída de la aeronave ocurre un día después de que los talibanes prometieron represalias luego de la publicación en el diario Los Angeles Times de fotografías en las que soldados estadunidenses posan con cuerpos mutilados de insurgentes.

Van a ser castigados por sus acciones y nos vamos a vengar, declaró el jueves el vocero talibán Zabihullah Mujaid.

El ejército de Estados Unidos se ha visto envuelto en meses recientes en escándalos en Afganistán, país que invadió el 7 de octubre de 2001, como la quema de ejemplares del Corán y la matanza de 17 pobladores a manos de un soldado estadunidense.

No es el primer accidente de helicópteros en Afganistán con miembros de la ISAF. Ya se han reportado casos en los que las aeronaves han sido derribadas por fuego enemigo y en otras debido a fallas mecánicas.

En agosto pasado, 30 soldados estadunidenses y siete afganos perdieron la vida al caer un helicóptero.

Los talibanes anunciaron que derribaron el aparato y la ISAF admitió que en la zona en que cayó el helicóptero se produjeron actividades enemigas.