El Instituto Carlos Slim de la Salud otorgó la edición 2012 del Premio Carlos Slim al doctor Carlos Sotelo Morales por su trabajo para combatir la cisticercosis entre la población más pobre de México y otras naciones, y al doctor José Villar Mendiara, quien dirige en Oxford un estudio multiétnico encaminado a prevenir los nacimientos prematuros y la malnutrición prenatal entre los grupos más vulnerables de la población.

Asimismo, la Fundación Canguro obtuvo el galardón a la Institución Excepcional por su labor para reducir los 4 millones de muertes de recién nacidos que se registran entre pequeños de un mes de vida en países en vías de desarrollo.

El método Canguro consiste en humanizar el cuidado de los niños prematuros al ponerlos en contacto directo con la madre e involucrar al padre en el cuidado del menor, en vez de introducirlo en una incubadora.

Los ganadores recibirán cien mil dólares en una ceremonia que este jueves por la noche encabezará el empresario Carlos Slim.

Roberto Tapia, director del Instituto Carlos Slim de la Salud, advirtió que el mayor reto de los pueblos y sus instituciones de salud es la prevención de enfermedades degenerativas y proliferativas, porque el costo es demasiado alto.

Detalló que los premios se otorgan por la importancia de la investigación, pero sobre todo por el impacto que tienen entre la población más vulnerable por inequidad social y económica o por estilo de vida.

La directora de la Fundación Canguro en Colombia, Nathalie Charpak explicó que el Método Madre Canguro (MMC) busca ayudar a los bebés más frágiles prematuros o de bajo peso al nacer mediante el contacto directo con su padre y madre como una solución innovadora, de bajo costo y reproducida con facilidad al mismo tiempo que humaniza los cuidados de prenatología.

Medicamentos efectivos y de bajo costo

El doctor mexicano Julio Sotelo explicó que a lo largo de 20 años de investigación sobre neurocisticercosis México ha logrado colocarse a la cabeza generando medicamentos efectivos y de bajo costo con los que se alivia la enfermedad sin neurocirugías, de tal forma que desde hace cinco años no se practican esas operaciones en el país para erradicar los cisticercos del organismo humano.

Puntualizó que sólo la hidrocefalia, que es una consecuencia, sí se sigue tratando con cirugía, pero dijo que este es un gran avance debido a que la presencia de cisticercos en humanos duplica los ataques epilépticos y, por desgracia, estas enfermedades atacan a las personas más pobres, pero sobre todo a las que viven en condiciones insalubres.

El doctor José Villar explicó que el objetivo de su investigación es evitar los nacimientos prematuros y que los niños nazcan malnutridos porque ya no será posible que tengan condiciones adecuadas de salud en la infancia ni en la juventud. Dijo que su trabajo, y el de 300 médicos más, consiste en prevenir desde el útero la malnutrición, y para ello se necesita la cooperación internacional.