Morelia, Mich., 16 de abril. Unos 200 disidentes de la comunidad religiosa Nueva Jerusalén salieron en marcha hacia Morelia, la capital de Michoacán, para exigir al gobierno estatal que intervenga, pues fanáticos religiosos cerraron las escuelas de educación básica en agosto de 2011, con el argumento de que la educación es cosa del demonio y es contraria a los designios de la Virgen del Rosario, santa patrona de esa población, fundada en 1973 por Papá Nabor, fallecido en febrero de 2008.

Los inconformes salieron este lunes a las 7 horas de su comunidad, ubicada en el municipio de Turicato. Se espera que lleguen a Morelia el próximo miércoles, pues deberán recorrer más de cien kilómetros a pie, primero por la región de Tierra Caliente, después a través de la zona boscosa de Tacámbaro, Villa Madero y Acuitzio del Canje.

El gobernador Fausto Vallejo Figueroa dijo estar entre la espada y la pared, pues la comunidad está dividida en posiciones radicales: por un lado, un grupo fanático se rige por principios religiosos extremos; por otro están los disidentes, que favorecen el laicismo en la educación, presididos por dirigentes de la CNTE.

Hemos atendido a delegados de los dos grupos, pero es una situación difícil porque son posiciones tan radicales, además de los intereses personales de los líderes de las partes en conflicto, señaló Vallejo Figueroa