Xochitepec, Mor., 15 de abril. La pugna del priísmo morelense, dividido entre las huestes del candidato a la gubernatura Amado Orihuela y su ex contrincante Manuel Martínez Garrigós, provocó que el partido organizara una marcha para mostrar el apoyo al aspirante a mandatario durante la primera visita de Enrique Peña Nieto a la entidad, gobernada desde hace 12 años por el PAN.

Todo estaba bien planeado y controlado en el Word Trade Center. Mientras Peña Nieto se dirigía al templete, acompañado por Amado Orihuela para darle su apoyo en el comienzo de su campaña por la gubernatura, frente a las instalaciones se vio llegar un grupo de manifestantes.

La marcha entró sin dificultades –la gente pasó por los arcos de seguridad con todo y pancartas– hasta el salón donde estaba por iniciar su discurso Peña Nieto. Sus cartulinas, que mantenían en alto, decían: ¡Fuera Martínez Garrigós! Por ello tuvieron ingreso libre.

En tanto, en Guanajuato, durante el comienzo de la campaña local priísta en esta entidad dominada por la derecha desde hace dos décadas, el candidato presidencial de la coalición Compromiso por México condenó a quienes han llegado al gobierno y han asumido una óptica patrimonialista, pues suponen que han llegado para quedarse y que los demás partidos políticos estorban y quieren hacerlos a un lado. Se equivocan, pues el único imperio es la voluntad del pueblo y éste dice que hay que cambiar, manifestó.

Insuficiencias panistas

En su discurso, el priísta enfatizó las insuficiencias del gobierno actual, en el contexto del reciente encuentro continental: Cuando los mexicanos escuchan en la Cumbre de las Américas, allá en Colombia, las voces de varios presidentes de América Latina diciendo que para la región estos años recientes han significado crecimiento económico y han logrado sacar a varios millones de la pobreza, los mexicanos nos preguntamos: ¿qué pasó con México? ¿Por qué en México no fue así? El país no mejoró en los pasados 12 años, pues tenemos más violencia, inseguridad y pobreza. Eso no lo inventamos, son datos del Inegi y del Coneval. Hay 12 millones más de mexicanos en pobreza, por eso vamos a cambiar todo el país.

Al encuentro con priístas guanajuatenses acudieron los gobernadores de Durango, Quintana Roo, Tamaulipas, Aguascalientes, Querétaro, Tlaxcala, San Luis Potosí e Hidalgo, así como el senador Manlio Fabio Beltrones y la candidata a la jefatura de Gobierno del Distrito Federal, Beatriz Paredes Rangel. Ante ellos, Peña Nieto expresó que hay una demanda social clara y recia de que la nación necesita cambiar ante la realidad de desempleo, inseguridad y estancamiento económico.

En Xochitepec, Morelos, acompañado por el dirigente nacional del tricolor, Pedro Joaquín Coldwell; el líder de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares, Emilio Gamboa Patrón, y candidatos a diputados y senadores en la entidad, Peña Nieto señaló que su compromiso es con el cambio. Porque Morelos está listo para el cambio, no permitamos que otros hagan lo que nos corresponde decidir con el voto, destacó.

Una vez más convocó a sus simpatizantes a no dejarse engañar, porque aquellos que quisieran que no hubiera partidos políticos, aquellos que quisieran estar solos en el gobierno sin competencia, hoy van a enfrentar la voz y el poder del pueblo.

Reiteró que México no puede seguir al garete y mucho menos con improvisación.

Luego de que la semana pasada el abanderado priísta tuvo que trasladar de Morelos al estado de México lo que habría sido su primera visita a la entidad, ante posibles manifestaciones de inconformidad por la imposición de Amado Orihuela, lo que resaltó del discurso del aspirante a la gubernatura fue su compromiso con el orden y progreso –lema de su campaña–, frase que distinguió a la dictadura de Porfirio Díaz.

Los manifestantes demandaron reponer el proceso de selección de candidatos locales y la renuncia de Martínez Garrigós, hoy dirigente estatal del partido.

Durante el acto, al que asistieron unos 2 mil simpatizantes –el lugar no tuvo el lleno esperado–, algunos de los cuales llegaron en autobuses con publicidad del candidato del PAN a la gubernatura, Adrián Rivera Pérez, se registró un incidente. Mientras el señor Gustavo Baena tomaba fotos al Peña, otro le sacó su billetera y se hicieron los golpes. Hubo algunos gritos y el personal de seguridad se puso en alerta. En lugar de agarrar al ratero me agarraron a mí, comentó.

En Guanajuato, el ex gobernador mexiquense insistió en que los primeros 12 años de este siglo han sido perdidos, pues han crecido la pobreza y el desempleo. “Mientras –continuó– en otras latitudes del continente se reivindica la reducción de los niveles de pobreza, en México se tiene que lamentar el crecimiento de un fenómeno que alcanza ya a 60 por ciento de la población.”

En los alrededores de la Alhóndiga de Granaditas se congregaron los priístas para recibir a Peña Nieto, quien les ofreció enfatizar las acciones de seguridad, porque no es posible que los ciudadanos continúen siendo rehenes de la delincuencia.

Más de dos horas de esperar al candidato, quien habló 12 minutos, poco después de que Juan Ignacio Torres Landa tomó protesta como candidato a gobernador y prometió poner fin a dos décadas de panismo.