Londres, 15 de abril. El Manchester United, líder de la liga Premier inglesa, mantuvo su ventaja de cinco puntos como líder del campeonato sobre el Manchester City gracias a una cómoda goleada por 4-0 sobre el Aston Villa, con doblete de Wayne Rooney, en la jornada 34.

Por otra parte, el Chelsea calificó a la final de la Copa de Inglaterra, tras golear 5-1 al Tottenham en un derbi londinense en Wembley marcado por una polémica arbitral. Los Blues enfrentarán el 5 de mayo al Liverpool, que ganó 2-1 al Everton el sábado.

A cuatro partidos para el final de la temporada, la ventaja del United parece muy importante para conquistar la Premier, aunque los dos contendientes al título se verán las caras en el estadio Etihad el próximo 30.

Rooney fue el héroe del partido, con sus dos tantos (a los minutos 7, de penal, y 73), pero también marcaron Danny Welbeck (43) y el portugués Nani en el descuento final (93), ante un rival que está en el sitio 15 y que no ofreció gran resistencia para el actual campeón.

El tanto de un rigorista penal en el arranque del partido ayudó mucho al ManU, gracias a Rooney, que dispuso en el minuto 18 de una buena oportunidad para ampliar distancias, pero fue Welbeck (44) quien lo consiguió, tras un buen pase del francés Patrice Evra.

El ritmo bajó sensiblemente en la segunda parte.

Rooney (73) sentenció con el tercero, con un certero disparo que sorprendió a Shay Given, mientras Nani, tras una gran asistencia de Jonny Evans, cerró la cuenta y festejó con una vistosa pirueta, en duelo en que el mexicano Javier Hernández se mantuvo en la banca.

Rooney suma 24 tantos y se acerca a tres del máximo goleador, el holandés Robin Van Persie (Arsenal).

Los Gunners de Van Persie, terceros y que acumulan ocho victorias en los últimos nueve partidos, recibirán el lunes al Wigan (17), con el único objetivo de sumar los tres puntos e impedir que se le acerquen el Tottenham (4º), el Newcastle (5º) y el Chelsea (6º), cuyos partidos se aplazan hasta el primero y 2 de mayo.

La polémica en el partido de la Copa FA tuvo lugar en el segundo gol del Chelsea, cuando el árbitro concedió un tanto en un balón del español Juan Mata que no había llegado a cruzar la línea, lo que motivó gran enfado en el Tottenham.

No fue gol. Fue un error cometido con buena fe, pero (el balón) no cruzó, en absoluto, la línea, declaró el técnico del equipo perdedor, Harry Redknapp.

Además de ese tanto de Mata en el minuto 49, los Blues marcaron gracias al marfileño Didier Drogba (43), el brasileño Ramires (77), Frank Lampard (81) y el francés Florent Malouda (92), mientras para el Tottenham había anotado en el 56 el galés Gareth Bale.

Los hombres del italiano Roberto Di Matteo fueron muy superiores a sus vecinos, a pesar de que en la clasificación de la Premier el Tottenham va adelante.

El resultado final fue contundente, pero el Tottenham se consideró muy perjudicado por ese segundo gol concedido a Mata, cuando el partido iba con un corto 1 a 0.

En el Chelsea, el entrenador Di Matteo admitió que el balón no entró a la portería. No cruzó la línea. Tuvimos suerte, pero en el pasado, en numerosas ocasiones, se tomaron decisiones en nuestra contra. Además, no hemos marcado dos goles, sino cinco, comentó el italiano.

El árbitro Martin Atkinson estaba mal situado para ver la acción, en la que el camerunés Benoit Assou-Ekotto despejó el balón sobre la línea.

Para el Chelsea será su cuarta final de la copa en seis años, tras haber ganado las tres primeras (2007, 2009, 2010).