Emmanuela Orlandi fue raptada en inmediaciones de sede papal
Domingo 15 de abril de 2012, p. 17
Ciudad del Vaticano, 14 de abril. El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, negó hoy que la sede apostólica esconda secretos o informaciones reservadas sobre el misterioso secuestro de la joven Emmanuela Orlandi, ocurrido hace casi 30 años.
En un comunicado de dos páginas, el religioso salió al paso de algunas versiones de la prensa italiana, según las cuales personalidades vaticanas tuvieron datos sobre la suerte de la muchacha y permanecieron en silencio.
Orlandi, de nacionalidad vaticana por ser hija de un empleado del Estado papal, fue plagiada el 22 de mayo de 1983 en las inmediaciones del Palacio del Apollinare de Roma, antiguo conservatorio y actual sede de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz.
Sobre su desaparición se han esbozado diveras hipótesis, incluida la supuesta participación de la Banda de la Magliana, grupo que manejó la delincuencia organizada en Roma en las décadas de 1980 y 1990.
Lombardi aclaró que varios personajes del Vaticano de hace 30 años ya fallecieron, por lo que es imposible un análisis detallado de los hechos, pero que se puede aclarar la postura de las instituciones pontificias gracias a testimonios y documentos disponibles.
¿Las autoridades vaticanas de entonces se empeñaron verdaderamente para afrontar las situaciones y colaborar con las autoridades italianas en tal sentido? ¿Existen elementos nuevos, no revelados pero conocidos por el Vaticano que podrían ser útiles para conocer la verdad?
, cuestionó.
El vocero recordó que el mismo papa Juan Pablo II se involucró en persona y en ocho ocasiones hizo llamados públicos para la liberación de Emmanuela, además de visitar a su familia y asegurar que fuese garantizado un puesto de trabajo a su hermano Pietro.
Estableció que de la misma manera los principales colaboradores del Papa apoyaron la investigación de las autoridades italianas, responsables de las pesquisas toda vez que el rapto tuvo lugar fuera del territorio vaticano.