Shangai, 14 de abril. En el Gran Premio de Fórmula Uno de China que se disputará este domingo, el mexicano Sergio Checo Pérez partirá desde la octava posición (1.36.524), detrás de Lewis Hamilton (McLaren), quien había logrado el segundo mejor tiempo (1.35.626), pero saldrá séptimo, debido a la sanción de cinco posiciones por cambiar la caja de cambios de su coche.

Respecto de la clasificación, Checo se mostró contento con el rendimiento de la escudería, aunque admitió que esperaba un mejor resultado. El equipo hizo un gran trabajo. Hace bastante tiempo que sabemos que necesitamos mejorar nuestro rendimiento en la clasificación, y creo que hoy (sábado) ha habido un claro avance, expresó.

Su compañero japonés Kamui Kobayashi saldrá desde el tercer puesto, detrás de los alemanes Nico Rosberg y Michael Schumacher, de Mercedes, un resultado que según Pérez otorga a Sauber muchas probabilidades de sumar puntos.

La tercera posición (de Kobayashi) supone un montón de posibilidades. Sin embargo, no soy muy soñador y el objetivo sigue siendo el mismo: sumar tantos puntos como sea posible, indicó.

El tapatío afirmó que tiene plena confianza en su automóvil: Contamos con un coche fuerte y que es bueno con los neumáticos. Estoy lleno de confianza y deseando que llegue la carrera.

En tanto, el vigente campeón del mundo, Sebastian Vettel, saldrá desde la decimoprimera posición. Es la primera vez, desde Brasil 2009, que no entró entre los 10 primeros y no pudo luchar por la pole que logró su compatriota.

Por otra parte, continúan los enfrentamientos en Bahréin y el rechazo hacia la F-1. El presidente del Centro para los Derechos Humanos del aquel país calificó la carrera de una vergüenza, y aseguró que la máxima categoría del automovilismo se convierte así en un deporte que apoya a dictadores y regímenes represivos.