Lunes 9 de abril de 2012, p. 26
Madrid. España, de nuevo en el centro de la crisis de la deuda en la eurozona, se encamina a un pinchazo financiero en 2013 que puede obligarla a recurrir a la ayuda internacional, advierten analistas. La inquietud sobre España se propaga en los mercados debido al aumento de la deuda pública (79.8 por ciento del PIB previsto en 2012 frente a 68.5 por ciento en 2011), la desviación del déficit, la fragilidad de los bancos y una nueva recaída en la recesión, mientras el desempleo, de 22.85 por ciento en 2011, sigue creciendo. Esta semana los inversionistas obligaron al Tesoro a pagar tasas en alza en su primera subasta de deuda.