El arranque de campaña de la candidata del Partido Acción Nacional a la Presidencia de la República, Josefina Vázquez Mota, es una continuación de su precandidatura, donde el tema de género no es una prioridad, por lo que ella no representa los intereses de las mujeres en el país sino los de su partido, señalaron miembros de colectivos feministas.

Proviene de un partido muy conservador y tradicionalista que se ha quedado corto en la defensa de los derechos de las mujeres y la promoción de una participación equitativa, y ella representa a ese instituto político, señaló Sofía Román, coordinadora en el Distrito Federal de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México.

Los colectivos y organizaciones que trabajan por la igualdad entre hombres y mujeres no esperamos mucho respecto a los contenidos de su campaña en virtud de que es la candidata de un partido que no tiene a las mujeres como público prioritario para ser atendido y que ella ha demostrado ser congruente con el ideario del PAN y en su actuación como secretaria de Educación, Desarrollo Social o legisladora nunca ha retomado la agenda de género, apuntó Martha Juárez, de Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad.

Las activistas por los derechos de las mujeres lamentaron que en la agenda de la candidata no figuren temas prioritarios para la población femenina, como son el feminicidio, la salud integral y la participación política, sin contar los más polémicos, como son la interrupción legal del embarazo y los derechos sexuales y reproductivos en general.

Consideraron las declaraciones de la aspirante presidencial (en el sentido de que es una mujer que usa falda pero tiene muchos pantalones y que defenderá a los mexicanos como una madre a sus hijos) como demagógicas, las cuales dan cuenta de que el toque de género en su discurso se reduce al rol de madre , por un lado, y por otro, al reconocimiento de la figura masculina como modelo único para ejercer el poder.

Al aseverar que defenderá a las familias mexicanas como una madre, nos otorga de facto una minoría de edad; no nos considera ciudadanas responsables ni capaces de incidir en la vida pública del país y nos manda un mensaje equivocado: que necesitamos tutela y ella será la figura autoritaria que nos dará ese cuidado, afirmó Juárez.

Román expuso que las garantías de mujeres y hombres deben defenderse desde la posición de funcionario público con obligaciones que cumplir de manera honesta y justa.

Angélica Nadurille, presidenta de la asociación Colectiva Ciudad y Género, comentó que la panista reduce el discurso de género al rol de la maternidad y los cuidados pero las mujeres no sólo somos madres.