Presenta Los hijos de los días en el máximo recinto cultural de Uruguay
Por primera vez un escritor ocupará la sala del histórico edificio utilizada para teatro, ópera y música
Es un volumen en forma de calendario, pues de cada jornada nace una historia
Martes 3 de abril de 2012, p. 4
Montevideo, 2 de abril. La primera escritora en la historia de la literatura universal se llamaba Enheduanna y con ese nombre firmaba sus versos, escritos en tablillas de barro, hace 4 mil 300 años, revela el uruguayo Eduardo Galeano en su libro más reciente, Los hijos de los días.
Es una obra en forma de calendario que va desde el 1º de enero al 31 de diciembre y de cada día nace una historia
, según anotó el mismo autor, quien protagonizará este martes un acontecimiento histórico para la cultura de su país.
Galeano leerá partes de este libro en el Teatro Solís de Montevideo, que es el templo cultural de los uruguayos, inaugurado oficialmente el 25 de agosto de 1856 con la representación de la ópera Ernani, de Verdi.
Los actuales responsables de ese lugar histórico, que es patrimonio del país sudamericano, calificaron de memorable
la presencia de Galeano, uno de los escritores uruguayos vivos más reconocidos y galardonados.
La sala es usada generalmente para teatro, ópera y música y será la primera vez que un escritor ocupe el escenario para leer su propia obra, algo que solamente consiguió antes el también escritor y poeta uruguayo Mario Benedetti (1920-2009) pero en un espectáculo literario y musical titulado A dos voces, con su compatriota Daniel Viglietti, compositor, músico y cantante.
Defensor de los desvalidos
Con su habitual mirada crítica sobre el mundo y su permanente actitud de defensa de los desvalidos, los indígenas y los anónimos del planeta, Galeano recorre la historia deteniéndose en cada día y provocando la inquietud del lector.
‘¿Sabía usted que Adán y Eva fueron los primeros exiliados? ¿O que el griego Eratóstenes midió la cintura del mundo, hace 2 mil 300 años, y se equivocó en 90 kilómetros?”, pregunta Galeano al lector, lo que se transforma en una cordial invitación a sumergirse dentro de la obra, de 430 páginas.
El libro Los hijos de los días se inicia el 1º de enero, que no es el primer día del año para los mayas, los judíos, los árabes, los chinos y otros muchos habitantes de este mundo
, sostiene Galeano, y afirma que la fecha fue inventada por Roma, la Roma imperial, y bendecida por la Roma vaticana, y resulta más bien exagerado decir que la humanidad entera celebra este cruce de frontera de los años
.
Sobre el 25 de agosto, día de 1830 en el que Uruguay declaró su independencia de todo poder extranjero
, Galeano recuerda que al amanecer de este día, de 1944, París enloqueció. La ocupación nazi había terminado
, pero acota que “los primeros liberadores de París fueron los republicanos españoles.
Vencidos en su tierra, se ha-bían batido por Francia. Ellos creían que después España sería rescatada. Se equivocaron
, escribe.
Respecto del 3 de septiembre, día de su propio nacimiento, en 1940, el escritor uruguayo señala que la portada del diario español ABC “informaba que habían sido derribados 116 aviones enemigos y no ocultaba su satisfacción ante el gran éxito de los ataques del Reich alemán.
En la tapa del diario sonreía, triunfante, el generalísimo (español) Francisco Franco. La gratitud era una de sus virtudes
, comenta irónicamente Galeano, en su texto, que tituló Gente agradecida
y que aparece en la página 283 del libro.
Los hijos de los días es el libro número 16 de Eduardo Galeano, en una serie que arrancó en 1971 con Las venas abiertas de América Latina, ensayo que narra la historia del saqueo de los recursos naturales del continente por potencias europeas, desde el siglo XV, con la llegada de los españoles.