Buenos Aires, 1º de abril. Argentina evalúa imponer trabas al ingreso de automóviles fabricados en México, debido al rechazo expresado por el gobierno del presidente Felipe Calderón a negociar un nuevo acuerdo comercial para el sector.

La decisión argentina, que fue publicada hoy por diferentes diarios, se conocería a corto plazo y tendría como objetivo obligar a México a renegociar las pautas del comercio bilateral automotriz.

Según una fuente del gobierno argentino citada en esta ciudad por la agencia de noticias DyN, Argentina tomaría medidas a corto plazo si México no accediera a rubricar un nuevo convenio.

La medida, en caso de ser aplicada, afectará al ingreso de autos Ford, Nissan, Honda, Volkswagen y General Motors, entre otras marcas.

El modo en que está planteado el acuerdo con México no resulta beneficioso y debe replantearse para lograr en forma muy rápida el equilibrio, había expresado el 21 de marzo último la ministra de Industria de Argentina, Débora Giorgi. Agregó que es imprescindible encontrar nuevas pautas de comercio con México que permitan equilibrar la balanza del sector.

En 2011, el déficit de Argentina con México en el sector automotor fue de 995 millones de dólares, cifra casi tres veces superior al resultado comercial del año anterior.

No estamos abiertos a tener ningún aspecto de negociación. Me parece hasta ilusorio, respondió ese mismo día el ministro de Economía de México, Bruno Ferrari.

Además, el funcionario mexicano advirtió que irá a instancias internacionales si es necesario para sostener los lineamientos del Acuerdo de Complementación Económica número 55 (ACE 55), firmado en 2002.

El convenio establece las pautas del comercio de vehículos y autopartes entre México y los cuatro países miembros del Mercosur: Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.

El pasado viernes el gobierno mexicano rubricó una carta de protesta que la Unión Europea y otros 12 países agrupados en la Organización Mundial de Comercio (OMC) plantearon a Argentina por su política de restricción a las importaciones. El gobierno argentino no va a permitir presiones ni externas ni internas para que alteremos nuestras políticas comerciales, contestó el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado oficial.

Argentina y México se verán las caras en la reunión que el Grupo de los Veinte (G-20) concretará en junio próximo en la localidad mexicana de Los Cabos.

La postura de Argentina ocurre a unos días de acciones similares de Brasil, que renegoció con México el ACE 55, a mediados del mes pasado, lo que implicó a México aceptar reducir la exportación de vehículos hacia ese país durante los tres siguientes años, en momentos en que se tenía un superávit en ese sector.

Bruno Ferrari indicó que México pedirá solo o en grupo un panel de solución de controversias ante la OMC, si Argentina no reacciona a la declaratoria presentada por nuestro país y otros 13 más contra las medidas restrictivas al comercio adoptadadas por la nación sudamericana.