Monterrey, NL. Ivonne Álvarez y Marcela Guerra se registraron ayer ante el Instituto Federal Electoral como candidatas del Partido Revolucionario Institucional al Senado, luego que la primera obtuvo licencia definitiva para dejar la presidencia municipal de Guadalupe, en una sesión a la cual no acudió la fracción del PAN en el cabildo, que utilizó la misma estrategia que el de Monterrey para autorizar al edil panista Fernando Larrazabal su separación definitiva del cargo. Por la mañana, Álvarez anunció que contendería por una senaduría, después de que el Poder Judicial dejó sin efectos un amparo que la obligó a regresar al municipio, del cual estuvo separada a partir de una licencia que recibió el 20 de enero. El ayuntamiento afirmó que existía causa justificada para la separación definitiva, pues no se podía violar el derecho de la alcaldesa a ser votada para otro cargo. Previamente, el juez tercero de distrito en materia administrativa sobreseyó el amparo a petición del cabildo, lo que dejó en libertad a Álvarez para pedir una nueva licencia y postularse. Aunque la decisión no ha sido fácil, la he tomado para seguir luchando por la gente, dijo Álvarez al anunciar su postulación. El cabildo de Guadalupe nombró encargado del despacho de la presidencia municipal al primer regidor, Carlos Rodríguez Padilla.