Texcoco, Méx., 28 de febrero. La muestra más amplia y representativa de la historia de la agricultura en México, compuesta por 32 maquetas de arte popular, más de 400 piezas que ilustran el desarrollo de los instrumentos agrícolas tradicionales y un concepto museográfico novedoso, además de obra mural de Alfredo Nieto, se exhibe en las seis salas del Museo Nacional de Agricultura de la Universidad Autónoma Chapingo.

Luis Morett Alatorre, responsable del proyecto, señaló que tras dos años de trabajo se pudo lograr esta exposición, donde convergen historia, ciencia y arte popular.

Las 32 maquetas reúnen a un selecto grupo de artistas del México rural, la mayoría premios nacionales, que con piezas de barro, cerámica, madera tallada, textil y plomo representan hitos del desarrollo histórico y social de la agricultura y la agronomía en el país.

La muestra está dividida en seis salas, cada una dedicada a una etapa histórica. En la primera, El Origen de la Agricultura y la Agricultura Prehispánica, destaca la maqueta modelada en barro por Filadelfo Morales, de Arrazola, Oaxaca, donde se representa una aldea y algunas de las primeras prácticas agrícolas hace poco más de cinco milenios.

De la sala La Colonia sobresale la pieza elaborada por José Juan García de Ocotlán, Oaxaca, en la que se representa al mercado tradicional de Tlacolula, ejemplo extraordinario de una vieja tradición de intercambio e interacción de productos agrícolas de las más diversas regiones del país.

En el área dedicada a la Gesta de Independencia hay cartonería realizada por Mónica Torres, representando a los héroes patrios acompañados por los instrumentos agrícolas tradicionales de la época.

La sala dedicada al México Independiente alberga una pieza de Francisco Martínez de Tlaquepaque, premio nacional de cerámica en 2008, en la que se ilustra la arriería del siglo XIX.

En el espacio Periodo Revolucionario se pone en relieve el trabajo de Floriberta Reyes, de San Bartolo Coyotepec, Oaxaca, en la que con barro negro modelado representa una batalla entre las huestes zapatistas y el ejército de Huerta, con un agregado especial en la retaguardia revolucionaria, con la presencia de los alumnos de la Escuela Nacional de Agricultura que se sumaron a la gesta revolucionaria, con teodolito y estadal en mano, para deslindar y restituir la tierra que había sido despojada a los pueblos.

La muestra concluye en la sala ‘México Rural Contemporáneo, donde destaca una maqueta en barro modelado policromado, realizada en Capula, Michoacán, por Hugo Fuentes, donde ilustra el círculo de miseria y migración rural.

Colofón con el que el discurso museográfico se rehúsa a concluir de manera apologética, y en su lugar invita a una reflexión crítica sobre el estado que guarda el México rural y su sociedad, de cara a las equívocas políticas oficiales hacia el sector, dijo Luis Morett.

Señaló que esta muestra se logró gracias un equipo de investigación museológica formado por académicos de Chapingo, como Patricia Muñoz, Miguel Ángel Sámano, Juan José Flores y José Arceo.

Además participaron un equipo de montaje de maquetas formado por alumnos de arquitectura de la Universidad Autónoma Metropolitana unidad Xochimilco y un equipo de viñetas y de diseño gráfico, coordinados por Xólotl Morett, Lilian Ramírez y Salvador Alba, respectivamente.

El concepto novedoso del montaje es la utilización de los paneles inferiores del mobiliario, donde van montadas las maquetas, y corresponde al horizonte visual de los niños, donde mediante más de 200 viñetas se ilustra el desarrollo temático del museo, materia gráfica con la que se elabora la primera guía infantil en el país de origen y desarrollo de la agricultura en México, dijo Morett Alatorre.