El crédito al consumo otorgado por la banca comercial alcanzó al cierre del año una nueva marca histórica de 493 mil millones de pesos, nivel que superó en 24 por ciento al registrado en 2010, informó este miércoles Jaime Ruiz Sacristán, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM).

La tasa de crecimiento anual del crédito al consumo, de 24 por ciento en 2011, prácticamente multiplicó por seis el crecimiento de la economía mexicana en el mismo ejercicio, que de acuerdo con el presidente de la AMB fue de 3.8 por ciento. El dato oficial del producto interno bruto (PIB) en 2011 será publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Es importante mencionar que en 2011 se alcanzó un nuevo máximo histórico en crédito al consumo, renglón que incluye tarjetas de crédito, préstamos personales y de nómina, explicó Ruiz Sacristán.

El anterior máximo de crédito al consumo se había dado en 2007, con 456 mil millones de pesos.

Entre 2003 y 2009, el crédito de la banca privada al consumo de personas y familias tuvo una tasa de crecimiento de 22 por ciento en promedio anual, marca superada por el 24 por ciento en 2011, añadió.

En conjunto, el crédito bancario a empresas y personas tuvo en 2011 un crecimiento de 16 por ciento, que triplicó la tasa de avance de la economía en el mismo periodo, expuso Ruiz Sacristán. Los crecimientos en el crédito se lograron sin que hubiera incrementos significativos en la morosidad de los usuarios, agregó el presidente de los banqueros, en una conferencia de prensa.

La cartera vencida total se situó al cierre del año en 3 por ciento del total de préstamos otorgados, una décima de punto más que el ejercicio previo, informó. En los préstamos al consumo, el monto de préstamos vencidos fue de 3 por ciento del total de otorgados, mismo nivel de los dos años previos.

La Asociación de Bancos de México anunció que a partir de la última semana de febrero hará una campaña para crear conciencia entre los usuarios de los servicios financieros sobre el manejo de su información para prevenir fraudes.

Hay fraudes y en alguna medida son abatibles con esfuerzos conjuntos; la campaña estará orientada a fortalecer esfuerzos prudenciales simples, como el manejo de la información de los usuarios y el cuidado de los instrumentos de operación, como cheques o tarjetas, explicó Enrique Zorrilla Fullaondo, vicepresidente de la ABM.