Nueva York, 7 de febrero. Gigantes, campeón de la NFL, se dio un baño de multitudes en Nueva York con un desfile ante decenas de miles de simpatizantes que se acercaron a saludar a sus héroes, tras su triunfo del pasado domingo en el Supertazón 46.

Jugadores y cuerpo técnico del conjunto neoyorquino recibieron además las llaves de la ciudad de manos del alcalde Michael Bloomberg, en una ceremonia llevada a cabo en un escenario montado en la puerta de la alcaldía, al sur de Manhattan.

Gracias a todos nuestros simpatizantes, a lo que creyeron en nosotros, en este equipo. Nunca perdimos la fe. ¡Felicitaciones para todos ustedes!, dijo el mariscal de campo Eli Manning, aclamado por la multitud como ¡MVP! ¡MVP! (jugador más valioso, por sus siglas en inglés).

Esta es la ciudad más grande del mundo y es hermoso devolver el trofeo Vince Lombardi exactamente al lugar al que pertenece, Nueva York, señaló el entrenador Tom Coughlin.

Bloomberg había anunciado el desfile en homenaje a los Gigantes el domingo por la noche, apenas terminó el partido ante Patriotas de Nueva Inglaterra, al que derrotaron 21-17 en Indianápolis.

Como marca la tradición, los jugadores desfilaron en camiones por el Cañón de los Héroes, parte de la célebre avenida Broadway, en el sur de Manhattan, donde fueron vitoreados por una marea de simpatizantes vestidos en su mayoría con camisetas azules de los Gigantes.

Acompañada por un sol radiante y una temperatura más que benigna para esta época del año, la muchedumbre se congregó en torno a un circuito que pasaba por Foley Square, y muchos tuvieron que quedarse a varias calles de distancia porque ya no había más lugar.

¡Congrats Big Bleu! (¡Felicidades, Gran Azul!), decía una de las pancartas que más podía verse en manos de los fanáticos. Otra rezaba ¡thaNkYou!, jugando con las letras de la palabra gracias en inglés y las siglas del equipo y la ciudad.

Bloomberg y el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, iban en uno de los camiones junto a Eli Manning y otros jugadores.

La alcaldía otorgó 500 entradas especiales para la ceremonia mediante un sorteo. Michael Strahan, campeón del Supertazón con Gigantes en 2008, acompañó a Bloomberg durante la presentación.

Este equipo creyó en cada uno de ellos y ustedes creyeron en ellos. ¡Declaro a la Gran Manzana la Gran Manzana Azul!, afirmó un triunfal Bloomberg antes de proceder a la entrega de las llaves de la ciudad.

Vestidos de civil, algunos al estilo de estrellas de rock, los jugadores fueron pasando uno a uno para recoger el obsequio y alguno hasta se animó a mostrar un paso de baile.

Más de 200 franjas de granito negro adornaron las aceras a lo largo del Cañón de los Héroes con los nombres de las personalidades homenajeadas en anteriores desfiles, desde generales de la Segunda Guerra Mundial hasta equipos deportivos, pasando por jefes de Estado, el papa Juan Pablo II y astronautas.

El último desfile había sido en 2009, cuando Yanquis de Nueva York ganó la Serie Mundial de beisbol estadunidense.