Melbourne, 26 de enero. El español Rafael Nadal, número dos del mundo, volvió a imponerse a su máximo rival, el suizo Roger Federer, tercero del orbe, en cuatro sets de 6-7 (5-7), 6-2, 7-6 (7-5) y 6-4, y se instaló en la final del Abierto de Australia, en la que se medirá al ganador del encuentro entre el serbio Novak Djokovic, líder del tenis mundial y vigente campeón, y el escocés Andy Murray (4).

Estoy muy contento con mis resultados de estas dos semanas. Me fue mucho mejor de lo que pensaba, de lo que soñaba hace poco. Es una victoria fantástica, una de las que me quedarán en la memoria para siempre, manifestó el hispano tras el partido.

El tenista de 25 años jugará su decimoquinta final en un torneo de Grand Slam, igualando a Andre Agassi, Jimmy Connors y Roy Emerson, aunque Federer mantiene el récord, con 23 finales y 16 títulos, cuatro ganados en Australia.

Se trata de la cuarta final consecutiva de un Grand Slam para Nadal, pero el registro también lo posee el helvético, con 10 finales al hilo entre Wimbledon 2005 y el Abierto de Estados Unidos 2007.

Nadal ahora tiene un balance de ocho victorias en 10 duelos contra Federer en torneos de Grand Slam y desde Wimbledon 2007 no pierde ante su archirrival. En el balance global de partidos entre ambos, el español ganó 18 veces y perdió nueve.

(Federer) empezó de manera muy agresiva, jugando a un nivel muy muy alto. Cuando juega así siempre tengo la impresión de que es casi imposible ponerse a su nivel, pero después de los tres primeros juegos pude empezar a pegarle a la bola, a jugar un poco más a mi ritmo, llegué al equilibrio, dijo Nadal.

El español Rafael Nadal jugará su decimoquinta final en un torneo de Grand SlamFoto Ap

Para el suizo la derrota llega tras un mal año 2011, en el que por primera vez desde 2003 no ganó ningún Grand Slam. El último fue en Australia en 2010.

“Rafa jugó bien del principio hasta el final. Empecé de buena forma, pero desaproveché oportunidades en todas las mangas. Él resistió y al final fue mejor. Era un partido duro físicamente, pero sólo estamos al principio de la temporada”, dijo Federer tras el encuentro.

Igual que el helvético, Nadal no vivió en 2011 su mejor temporada, en la que sólo ganó tres torneos y perdió siete finales, seis contra Djokovic y una contra Murray.

El tenista español destacó la importancia de alcanzar la final del primer grande del año: “Es una manera fantástica de empezar la temporada, me da plena confianza y también mucha calma en mi manera de trabajar. Lo hago en pequeñas cosas que funcionan bien, sin realizar mucho entrenamiento.

Voy a hacer lo mejor posible para intentar que sea una gran final y espero tener posibilidades, pero si son mejores que yo y me ganan, me iré a casa muy contento con el torneo. Sabré que el trabajo da sus frutos y seguiré haciéndolo de esta manera.