Andrés Manuel López Obrador se comprometió, en caso de alcanzar la Presidencia de la República, a crear la secretaría de ciencia y tecnología, tareas a las que destinará uno por ciento del producto interno bruto (PIB), y designó al doctor René Drucker Colín titular de la futura dependencia.

El precandidato del Movimiento Progresista –integrado por PRD, PT y Movimiento Ciudadano– hizo el anuncio en el contexto del foro sobre educación, ciencia y tecnología celebrado en un hotel de la capital de Aguascalientes, al que acudieron unas mil personas, incluidos integrantes de PRI, PAN y PVEM.

Sostuvo también que creará un instituto de energías renovables, por la importancia que reviste cuidar los miles de recursos y entregar buenas cuentas a las generaciones futuras.

En materia educativa, planteó que la lectura sea asignatura independiente y que se imparta todos los días en nivel básico; que se reduzca el número de alumnos por grupo para que tengan éxito los métodos de aprendizaje, y que esto se realice de manera gradual, de acuerdo con las condiciones económicas: la meta es que no haya más de 30 alumnos por aula.

Agregó que pondrá en marcha la escuela de tiempo completo que se ampliará a zonas marginales, con horarios adaptables, albergues, alimentación y transporte. Se otorgarán becas en todos los niveles, uniformes y útiles escolares en forma gratuita, y advirtió que en los planes de estudio de centros tecnológicos se volverán a incluir las materias de civismo, ética, filosofía y literatura.

Por otra parte, rechazó que la delincuencia organizada pueda influir en la elección del primero de julio: Nada ni nadie va a detener el anhelo de la gente de cambiar las cosas en el país, de esta situación de corrupción, de opresión y de injusticia.

López Obrador visitó también Zacatecas, donde afirmó que si las fuerzas progresistas ganan la Presidencia debe quedar claro que defenderemos con seriedad nuestra soberanía y nuestra independencia, pues México nunca será colonia ni protectorado de ningún país extranjero.

Dijo que su eventual gobierno mantendrá una relación de respeto y cooperación con Estados Unidos, pero aclaró que ya no será ese el único país con el que México tenga relaciones. Nuestra nación volteará la mirada a los países de América latina y el Caribe, por razones históricas y de solidaridad. Vamos a diversificar nuestras relaciones con otros pueblos y naciones, con Rusia, China, Brasil y la región Asia-Pacífico para fortalecer los vínculos económicos y comerciales, así como para auspiciar un orden internacional construido entre todos, donde la globalización no quiera decir hegemonía.

Señaló que “para ser respetados y respetables en el mundo, es válido el criterio de que la mejor política exterior es la interior, pues si hacemos bien las cosas en el país, si hay progreso, justicia y seguridad social para todos, vamos a recuperar el lugar que merecemos en el concierto de las naciones.

Se propondrá en su momento un cambio sustancial en la relación bilateral: vamos a convencer y persuadir (a Washington) de que por el bien de las dos naciones es más eficaz una política de cooperación para el desarrollo que dar prioridad a la cooperación policiaca y militar, como se hace ahora.

Hoy, dijo, el monto de la ayuda que Estados Unidos otorga a México ronda los 478 millones de dólares; además de ser raquítica, 450 millones se destinan a la Iniciativa Mérida. Pero manifestamos que queremos más recursos y cambiar radicalmente las prioridades a ámbitos como la cooperación económica y laboral.

López Obrador participó en el foro internacional sobre la comunidad de mexicanos en el extranjero y la política exterior, que se efectuó en el teatro Fernando Calderón de la capital zacatecana, con representantes de migrantes radicados en Illinois, California, Colorado, Texas, Oregon, Kansas y Carolina del Sur.