Son abismales las diferencias entre el grupo uno y el dos, admite
Enfrentará a El Salvador, Barbados y Dominicana en la lucha por el ascenso
Jueves 26 de enero de 2012, p. a14
El futuro del tenis mexicano en Copa Davis no es muy esperanzador. El capitán del equipo, Jorge Lozano Márquez, al hablar con realismo admitió que la meta es volver el próximo año al grupo uno de la Zona Americana, pero una vez que lo consigan otra vez tendrán que enfrentarse a las distancias de las clasificaciones, que son abismales.
El descenso al grupo dos fue inevitable, explicó, ante la disparidad en el nivel de los competidores. El año pasado México perdió todas sus series; primero ante Canadá 1-4, luego contra Ecuador 2-3 y finalmente frente a Colombia 0-5.
El equipo canadiense tenía un tenista clasificado en el lugar 33 del mundo; Ecuador en el 250, Colombia a un 50 y a un 70, pero nuestro mejor jugador estaba en el sitio 400 y el siguiente en 550
, explicó sobre los contrastes en las diferencias en las posiciones del ranking mundial: Un 50 contra un 400, claro que hay diferencia, aunque juguemos de locales
.
Por eso la apuesta para la siguiente serie de primera ronda que se jugará ante El Salvador – del 10 al 12 de febrero en la Ciudad de México– en un grupo que consideró sin complicaciones y por lo tanto con amplias posibilidades de ascender.
Se trata de una llave cómoda, integrada además por Barbados y República Dominicana, admitieron en el equipo y en la Federación Mexicana de Tenis, por lo que el cuadro nacional es favorito y lleva la consigna de recuperar el lugar que perdió en 2011.
Lozano reconoció que las selecciones que enfrentarán ahora tienen jugadores que han dado sorpresas en competencias recientes y que podrían complicarles a los tricolores, pero consideró que son equipos que acaso solamente tienen un jugador estrella y que en conjunto los mexicanos son mejores.
Estamos en el grupo dos: a nadie le gusta estar aquí. Todos nos sentimos superiores y tenemos mejor equipo
, aseveró.
Además, Lozano dijo que estar en este sector le permitirá debutar a jóvenes ante rivales que en primera instancia no son tan peligrosos. Podrán foguearse para que adquieran la experiencia necesaria para elevar el nivel en la clasificación de los tenistas nacionales y puedan aspirar a mejores resultados en el futuro.
Si no debutamos juveniles en el grupo dos, pues en el uno nunca lo haremos. Hay que darles la oportunidad ahora porque los juveniles se hará cargo del equipo cuando releven a los que hoy tienen experiencia
.
El mejor argumento que esgrimió fue el propio.
A los 17 años Lozano debutó en Copa Davis (1981), en mancuerna con Raúl Ramírez, con la que se enfrentaron a la dupla conformada por el número dos del mundo John Mc Enroe y Roscoe Tanner. Aún se le eriza la piel al recordarlo.
Era en un estadio lleno en San Diego y perdí los partidos. No gané los singles pero eso me ayudó en mi carrera porque ya sabes lo que es jugar en Copa Davis
, señaló el dirigente.
Con esa tesis ahora pretende que Santiago González –a quien le ha ido bien en los torneos recientes– guíe a los tenistas jóvenes, que haga pareja con algunos novatos para aprovechar que existe ventaja sobre los rivales del grupo dos.
Explicó que fue un proceso natural por el que González se erigió como líder que ha funcionado de ejemplo perfecto en el equipo.
Debemos aprovechar las condiciones actuales para mejorar el nivel que tienen los juveniles
, insistió, porque de lo contrario el tenis mexicano seguirá estancado.
Luego vienen críticas, pero es nuestra realidad, si seguimos igual seremos mejor equipo que todos los del grupo dos, pero no del uno
, admitió.