El presidente Felipe Calderón viajará a Davos, Suiza, el próximo miércoles sin la prensa mexicana, que es excluida de las giras internacionales por cuarta ocasión en los tres meses recientes.

Con esta sexta visita, el mandatario panista impone el récord de no haber faltado a ninguna cita con el Foro Económico de Davos, considerado el club de los ricos del mundo por congregar a líderes mundiales y empresariales.

Ayer, el argumento que dio Los Pinos para no incluir a los reporteros de la fuente presidencial en la gira –del 25 al 28 de enero– fue que sólo tendrá una reunión abierta a la prensa.

La última vez que los reporteros acudieron a actividades internacionales de Calderón y pudieron formular preguntas en conferencia de prensa fue a principios de noviembre, en la reunión del Grupo de los 20 en Cannes, Francia.

Antes asistió solo a las cumbres Iberoamericana, celebrada en Asunción, Paraguay, a finales de octubre, y de América Latina y el Caribe, realizada el 2 de diciembre en Caracas, Venezuela, país que visitaba por primera vez en el sexenio.

La Presidencia tampoco convocó a los periodistas a la reunión anual de la Asociación para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, efectuada en noviembre en Hawai, a la cual el michoacano no asistió por la muerte del entonces secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora, en un accidente aéreo.

Sus participaciones en el foro económico no han estado exentas de polémica. Debutó en 2007 con un discurso crítico contra las expropiaciones decretadas en Venezuela, Bolivia y Argentina, y las dictaduras personales vitalicias, razón por la cual tuvo un diferendo con Hugo Chávez y el brasileño Luiz Inacio Lula da Silva.

En 2008 presumió que México estaba mejor preparado que nunca antes para enfrentar la tormenta y definió a su equipo económico como uno de los mejores del mundo, pero ese año el país vivió una de las crisis más severas de la historia.

Un año después le dijo a Ernesto Zedillo, en una sesión pública, que estar en la oposición era como el paraíso, pero cuando estás gobernando estás en el infierno. De inmediato la Presidencia de la República negó esa aseveración y la atribuyó a un error de traducción.

En los dos viajes siguientes tuvo una agenda de bajo perfil, aunque en 2010 llamó la atención el encuentro privado que sostuvo con ejecutivos de empresas petroleras trasnacionales, a las que prometió otorgar más facilidades para invertir en el sector tras la reforma energética.