Grupo Iusacell presentará hoy denuncias en contra del presidente de la Comisión Federal de Competencia (CFC), Eduardo Perez Motta, ante la Secretaría de la Función Pública y ante la Procuraduría General de la República, por difundir información confidencial de un expediente, que es el que aborda la alianza entre Televisa y Iusacell, operación que consiste en la adquisición de 50 por ciento de la telefónica en mil 600 millones de dólares.

El vocero de Grupo Iusacell, Luis Niño de Rivera, señaló que sus abogados también solicitarán la recusación de Pérez Motta en la decisión sobre si se aprueba o no la transacción, por lo que a unos días de que el pleno de la CFC tome una decisión –se prevé que sea el martes próximo–, su presidente podría quedar impedido de votar, lo cual sería decisión del pleno.

Niño de Rivera explicó que las dos denuncias en contra de Pérez Motta se sustentan en que reveló información confidencial a analistas de la casa de cambio Scotia Capital, que se trasladó a un documento fechado el 6 de enero, que consistió en señalar que él se sentía en libertad de votar en contra de la alianza porque Televisa no le consultó ni le informó antes de hacerlo.

Pérez Motta también dijo a Scotia Capital que el análisis de la CFC no estaba considerando de forma relevante el negocio de la telefonía móvil, sino los negocios que tienen Televisa y Iusacell y que pudieran derivar en operaciones conjuntas. Niño de Rivera señaló que la alianza se refiere a un negocio de telefonía móvil, porque en televisión abierta Televisa y Televisión Azteca seguirán siendo fieros competidores.

La alianza en cuestión ya derivó en la creación del producto llamado Totalplay, en el que participan Iusacell y Televisa, con 50 por ciento cada uno, y que ofrece servicios de televisión de paga, Internet y telefonía fija a través de fibra óptica, más telefonía móvil a través de Iusacell.

Niño de Rivera dijo que Pérez Motta incurrió en un delito penal al revelar la información confidencial, por lo que se hará una denuncia ante la PGR. Consideró que también violó la ley de servidores públicos, por lo que la otra se presentará ante la SFP.

Argumentó que la CFC lleva nueve meses analizando si la operación procede o no, lo que habla de la incapacidad de Pérez Motta, y dijo que a estas empresas les interesa el cumplimiento de la ley y más competencia.

El miércoles pasado Eduardo Pérez Motta denunció que la CFC es objeto de presiones por parte de agentes económicos que buscan influir en sus decisiones, lo cual se ha reflejado en declaraciones de representantes de Iusacell que se han adelantado a mi voto y han puesto en duda públicamente mi imparcialidad en la próxima decisión sobre la concentración Televisa-Iusacell, que por mandato legal deberá tomarse en el pleno.

Si la CFC aprueba la operación consolidará a Televisa como monopolio puro, advierte

Miriam Posada García

El presidente de Dish México, Ernesto Vargas, en la conferencia de prensa de ayerFoto Yazmín Ortega

Si la Comisión Federal de Competencia (CFC) aprueba la alianza Televisa-Iusacell sin regular el mercado, consolidará a Televisa como un monopolio puro, condenará a la quiebra a empresas como Dish y sentenciará a los mexicanos a tener sólo a estas dos empresas, con la gravedad que ello conlleva, advirtió el presidente de Dish de Multivisión (MVS), Ernesto Vargas Guajardo.

Señaló que la intención de Iusacell de demandar a Eduardo Pérez Motta y separarlo de la votación sobre esta concentración refleja la falta de respeto a las instituciones, y si lo consiguen se verá el lugar en que estamos parados los mexicanos.

Dijo que los mexicanos y las empresas que tratan de participar en el mercado de la televisión y las telecomunicaciones somos víctimas de lo que dejaron otros gobiernos, pero la decisión que esta administración tome sobre esta alianza puede ser la sentencia de dejar sólo en el mercado a Televisa y Televisión Azteca sin regulación, ya que autorizar la concentración sin la regulación debida aniquilará la competencia y convertirá a Televisa en monopolio puro.

Aseguró que la decisión está influida por la época electoral que vive el país y que el ambiente sería diferente si hubiera gobiernos que velaran por los intereses de la sociedad, y no por los de sus partidos. El riesgo que hoy percibe la industria se debe también a la falta de regulación y de una política consistente, sostuvo.

Criticó que en los últimos años se hayan autorizado a Televisa operaciones como la compra de Cablemás, Cablevisión Monterrey, Bestel, así como la concesión de un par de hilos de fibra oscura de la Comisión Federal de Electricidad, sin que medie ninguna regulación, y advirtió el riesgo para la industria si en esas condiciones se autoriza la concentración con Iusacell.

Puntualizó que Dish y MVS no están en contra de la operación, pero sí de que se incremente la desigualdad en la competencia así como el ejercicio de prácticas desleales como las que ejercen Televisa y Tv Azteca, ya que la empresa de Emilio Azcárraga se negó a anunciar Dish, y en cuanto se creó Totalplay con Iusacell Azteca le negó espacios publicitarios.

Señaló que la Comisión de Competencia debe imponer condiciones como que el must carrier y el must offer (la transmisión de canales de otros operadores de televisión abierta y restringida) sea gratuito para todos los que están en el negocio de televisión de paga, y que no se condicione el empaquetamiento para tener acceso a canales de televisión abierta u otros; que se promueva la producción independiente, ya que ahora está concentrada en las dos televisoras, y que todos los eventos de interés nacional como el Mundial de Futbol, los Juegos Olímpicos y otros sean opcionales para el suscriptor.

Vargas Guajardo advirtió que si no se dan esas condiciones básicas la participación en el mercado será más dispareja que ahora para las empresas de televisión de paga y de telecomunicaciones.