Productores de Tlaxcala, Hidalgo, Morelos, Puebla, Guanajuato y estado de México, así como integrantes de El Barzón, se sumaron a la Declaración de Chihuahua y manifestaron su apoyo a la marcha que salió de esa entidad con destino al Distrito Federal en demanda de acciones concertadas, certeras y contundentes para atender la emergencia agroalimentaria.

En conferencia de prensa expusieron que los efectos de la sequía en sus estados son graves y denunciaron que los campesinos no se han visto beneficiados conla partida federal destinada a aliviar la contingencia.

Mientras tanto, el secretario de Agricultura, Francisco Mayorga, aseguró que el gobierno federal ha actuado de manera oportuna y responsable en la atención a la sequía, con medidas de prevención y mitigación, y una participación coordinada de productores, autoridades locales y la comunidad académica y científica.

El repartir únicamente dinero no resuelve la sequía; impulsamos medidas de prevención y mitigación que ya están incluidas en el presupuesto de este año, entre ellas, la contratación de seguros catastróficos, la reconversión de cultivos, mayor inversión en bienes públicos y un uso sustentable de los recursos naturales, dijo. Aseguró que se tiene prevista la contratación de seguros por 24 mil millones de pesos para enfrentar fenómenos climatológicos, así como un monto de 17 mil millones para la prevención de riesgos.

A su vez, el presidente del Senado, José González Morfín (PAN), dijo que frente a la posibilidad de una recesión económica mundial se contempló esa eventualidad durante la aprobación del paquete económico.

Destacó que no sólo se revisó el panorama internacional, sino también que el país iba a un año electoral y había que ser cuidadosos y responsables en la aprobación del presupuesto y la ley de ingresos. El problema (la recesión) está ahí. Lo está diciendo la ONU; es algo que todos estamos viendo y tenemos que ser extremadamente cuidadosos.

Por su parte, los productores exigieron a los gobiernos estatales garantizar la entrega de recursos destinados por el gobierno federal para atender la sequía, así como su distribución equitativa y manejo transparente. Consideraron urgente sensibilizar a la población de las ciudades del riesgo de carestía de alimentos y pedir su apoyo a la manifestación que arribará el próximo domingo a la capital del país.

No tenemos granos ni pasturas; no hay con qué alimentar al ganado ni con qué sembrar. No hay semillas ni fertilizantes, expuso Miguel Juárez, productor de Tlaxcala. Para Uriel Vargas, de El Barzón, es fundamental que la gente de las ciudades cobre conciencia, y que tanto productores como consumidores unan su exigencia a los gobiernos federal y locales para que atiendan estas demandas.

Vargas subrayó que la situación de hambruna que se vive en Chihuahua y en otros estados se va a ir acercando a las ciudades, y para cuando reaccione la gente no va a haber agua ni para tomar. También solicitaron detener los gasolinazos, pues los incrementos en el diesel tienen la consecuencia natural de encarecer los productos del campo.

Por separado, la Central Campesina Independiente llamó a la Cámara de Diputados a modificar el Programa Especial Concurrente 2012 para atender la emergencia agroalimentaria, toda vez que cuenta con facultades legislativas para hacerlo y la justicia social amerita la modificación.

En tanto, la Secretaría de Desarrollo Social informó que se inició la entrega de 100 mil paquetes de ayuda alimentaria a los indígenas de la sierra Tarahumara. Se espera entregarlos en 104 albergues instalados en 23 municipios de la región, durante la próxima semana.

Por la noche, la Secretaría de Gobernación informó que el gobierno de Sonora solicitó a la administración federal 32.9 millones de pesos para hacer frente a los efectos de la sequía en nueve municipios declarados zona de desastre natural.