Puerto Príncipe, 10 de enero. El gobierno de Michel Martelly decretó hoy medidas de recogimiento para conmemorar este jueves el segundo aniversario del devastador sismo que destruyó el país más pobre de América, causó la muerte a más de 222 mil personas y dejó a más de millón y medio sin casa.

Por lo pronto, la Comisión Europea lanzó hoy un nuevo programa de ayuda humanitaria para Haití, de 23 millones de euros (29 millones de dólares), para reconstruir los hogares de unas 60 mil personas afectadas por el sismo.

Según anunció el gobierno haitiano, este 12 de enero todas las oficinas públicas, las escuelas, comercios e industrias permanecerán cerradas, al igual que lo harán, por decreto, las discotecas y otros locales de ocio y esparcimiento.

Según la Misión de Estabilización de Haití de Naciones Unidas (Minustah), el país registra ahora señales de progreso y resultados positivos, si bien sigue afrontando desafíos enormes, dijo el organismo al publicar este martes un informe con motivo del aniversario del devastador sismo.

Los logros son reales y no se debería subestimar su impacto, subrayó a los medios el coordinador humanitario de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para Haití, Nigel Fisher.

Según el informe de la Minustah, entre julio de 2010 y noviembre de 2011, el número de personas desplazadas que viven en campamentos de refugiados se redujo 65 por ciento, hasta las 520 mil.

Además, en este tiempo se ha logrado retirar de las calles más de 5 millones de metros cúbicos de escombros, lo que representa aproximadamente la mitad de lo provocado por el terremoto.

De acuerdo con los datos manejados por la ONU, en la actualidad hay además más niños escolarizados en primaria que antes del sismo y han aumentado significativamente las tasas de inmunización de menores, entre otros.

Pese a todo, Fisher llamó a los haitianos a no caer en la complacencia ante un país que tiene aún ante sí enormes retos. Todavía se requieren enormes esfuerzos sostenibles para aliviar la situación de centenares de miles de personas, alertó el funcionario internacional.

Entre otros, indicó que se debe continuar la ayuda a corto plazo para más de medio millón de desplazados, mientras que también se acumulan retos a largo plazo como reforzar las instituciones centrales y locales, el imperio de la ley, servicios sociales accesibles, mejorar el suministro de agua y las instalaciones sanitarias, entre otros.