En paralelo a la elección presidencial, en 2012 se disputarán siete gubernaturas en el país y se renovarán congresos en 15 entidades. Característica de este año electoral es que los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) tendrán en juego sus principales bastiones: el sol azteca el Distrito Federal; Acción Nacional Jalisco y Guanajuato, donde han gobernado más de una década.

Morelos, otro estado bajo administraciones panistas desde hace dos sexenios, Chiapas, Tabasco y Yucatán completan el panorama de elecciones de gobernador, que se disputarán todas el primero de julio. Entre las entidades que renovarán congresos locales y alcaldías sobresalen dos actualmente bajo control priísta, Nuevo León y el estado de México.

Con las encuestas a escala federal en su favor, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) disputará las gubernaturas en cinco estados donde actualmente es oposición: Distrito Federal, Guanajuato, Jalisco, Morelos y Chiapas, entidades en las que el tricolor tiene varias administraciones consecutivas sin ser gobierno. El caso más emblemático es la capital del país, donde nunca ha ganado una elección desde que se instauraron, en 1997.

El PRI aparece con definiciones sólo en Yucatán, con Rolando Zapata, y presuntamente en el Distrito Federal, con Beatriz Paredes, quien hace seis años disputó sin éxito la jefatura de Gobierno.

En el resto de entidades ha puesto en práctica un esquema para evitar rupturas. En diciembre hubo reuniones de los aspirantes. En Jalisco son María Esther Sherman, Ramiro Hernández, Miguel Castro, Jorge Aristóteles Sandoval, José Trinidad Padilla, Héctor Vielma y Arturo Zamora. Éste último es el que tiene mayores posibilidades de alcanzar la candidatura; otros con posibilidades son Sandoval, alcalde de Guadalajara, y Vielma, de Zapopan.

En Morelos, la lista es muy larga: Roberto Abe, Rodolfo Becerril, Guillermo del Valle, Fernando Martínez Cué, Manuel Martínez Garrigós, Jorge Meade, Jorge Morales Barud, Francisco Moreno, Amado Orihuela, Marisela Sánchez y Samuel Palma. Quien mayor activismo ha mostrado es el alcalde de Cuernavaca, Martínez Garrigós, si bien sus opositores le atribuyen el elevado endeudamiento de las arcas municipales, así como la violencia imperante.

En Tabasco hay cinco aspirantes: Georgina Trujillo, Jesús Alí de la Torre, Luis Felipe Graham, Evaristo Hernández y Francisco Herrera. Todos acudieron a la sede nacional del PRI.

En Chiapas, debido a la impugnada alianza signada por el PRI con los partidos Verde y Nueva Alianza en los tiempos de Humberto Moreira, se insiste en que el tricolor cederá la candidatura al senador por el PVEM Manuel Velasco, de 31 años y nieto del ex gobernador Manuel Velasco Suárez.

Sin embargo, el PRI enfrenta la oposición interna de la senadora María Elena Orantes, quien ha impugnado la coalición y amenaza con abandonar el partido si se mantiene el compromiso con el PVEM.

En Guanajuato han levantado la mano el diputado local Miguel Ángel Chico Herrera, el senador Francisco Arroyo Vieyra y José Ignacio Torres Landa.

En ese mismo estado, el PAN busca mantener el poder, por lo que se procesó con los interesados el método de selección –una elección donde participará la militancia–, por lo cual descartó la posibilidad de ruptura. Los precandidatos son el ex secretario de Salud José Ángel Córdova; Miguel Márquez, ex secretario de Desarrollo Social local, y el senador Ricardo Torres Origel.

Jalisco es otro estado donde el PAN tiene confianza en refrendar, pero enfrenta severos problemas y la posibilidad de perder frente al PRI. En las anteriores elecciones el PAN no pudo retener Guadalajara ni los municipios conurbados. Entre los aspirantes se encuentra Fernando Guzmán Pérez, ex secretario de Gobierno; Alfonso Petersen, ex secretario de Salud; Hernán Cortés Berumen, ex dirigente estatal, y Alfonso Ulloa, ex director de Promoción Económica.

En Morelos el PAN también enfrenta serias dificultades para retener el poder, debido a los problemas de seguridad. Entre los interesados se encuentra Víctor Manuel Caballero Solano, secretario de Salud; Demetrio Román Isidoro, titular de Desarrollo Urbano; Alejandro Villarreal, secretario de Planeación y Finanzas, y el senador Adrián Rivera Pérez.

En Tabasco, el PAN históricamente tiene poca presencia. Entre quienes buscan la candidatura se encuentra Milton Lastra, alcalde de Balancán, y Gerardo Priego, ex secretario de vinculación con la sociedad del CEN del albiazul.

En Yucatán, el secretario de elecciones del blanquiazul aseguró que los gobiernos priístas han cometido errores que han influido en los electores y colocan al PAN en buena posición. Los aspirantes son la diputada Sofía Castro Romero y Joaquín Díaz Mena, ex delegado de la Secretaría de Educación Pública en el estado.

Para el PRD, en la disputa por las gubernaturas, tiene opciones en cuatro entidades: Distrito Federal, Tabasco, Chiapas y Morelos. Sin embargo, la mayor atención la concentra el histórico bastión perredista y reserva de votos, la capital del país, pero retenerla dependerá de sortear la multiplicidad de candidatos que aspiran, sin que haya una ruptura en la izquierda: Miguel Ángel Mancera, Mario Delgado, Alejandra Barrales, Carlos Navarrete, Porfirio Muñoz Ledo, Pablo Gómez, Martí Batres, Laura Velázquez, Gerardo Fernández Noroña, Benito Mirón Lince.

Por lo que hace a Tabasco, otra entidad donde el PRD ha tenido presencia importante históricamente hasta el momento, el único aspirante del Movimiento Progresista es el senador con licencia Arturo Núñez, si bien prevalecerá el método de elegir al mejor posicionado en las encuestas.

En cuanto a Morelos, entre los aspirantes que se mencionan destaca Graco Ramírez, aunque podrían surgir más aspirantes. En cuanto a Chiapas, aunque la actual administración es parcialmente perredista, pues surgió de una coalición amplia, todo hace apuntar que el candidato que postulará el Movimiento Progresista podría surgir de una escisión priísta, en especial ahora que enfrenta serios cuestionamientos derivados del acuerdo para favorecer a Manuel Velasco. Por ello, no se descarta la postulación de María Elena Orantes o de Ricardo Aguilar Bodegas.

En Jalisco, donde la izquierda tiene escasa presencia, el abanderado podría ser Enrique Alfaro, en tanto que en Yucatán, donde mantienen una marginal participación, podría ser Gilberto Balam Pereira. Finalmente, en Guanajuato, suena como aspirante el coordinador estatal de Morena, Ernesto Prieto.