El secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio Irazábal, encabezó la entrega del Premio Nacional de la Juventud 2011, en una breve ceremonia a la que no asistió el presidente de la República, Felipe Calderón, pese a que se trata del galardón más importante que concede el gobierno mexicano para reconocer a los jóvenes más destacados del país.

En un acto que duró menos de una hora, donde se entregaron reconocimientos a 18 jóvenes sobresalientes en el campo académico, defensa de derechos humanos, medio ambiente e inclusión de personas discapacitadas, entre otras categorías, el funcionario subrayó la importancia de premiar a quienes con sus acciones fortalecen a la sociedad civil, porque es débil la nuestra, así como a quienes impulsan los derechos humanos, materia en la que, reconoció, tenemos aún dilemas serios.

Al dar por concluido, con la entrega del citado galardón, el año de festejos por el 90 aniversario de la fundación de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Lujambio Irazábal reiteró que la administración actual entregará en 2012 un millón de becas en nivel medio y superior, a fin de frenar la deserción, así como disminuir el número de jóvenes de escasos recursos que no pueden continuar sus estudios debido a problemas económicos.

Por su parte, Miguel Ángel Carreón, director del Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve), afirmó que en México los jóvenes no son apáticos ni violentos. Lo que desea este sector de la población, enfatizó, es rescatar lo que es suyo y que los enemigos de México les han arrebatado malamente.

Reunidos en el salón Hispanoamericano de la SEP, agregó que si la juventud estuviera adormilada y sin oportunidad, si todo eso fuera verdad, hoy seríamos 36 millones de víctimas de la delincuencia, de sicarios, y de personas sin sentido y sin futuro.

El titular del Imjuve estimó que por cada joven involucrado en actividades delictivas otros 650 están estudiando secundaria, preparatoria o la universidad, y apuntó que por cada joven que supuestamente tenemos en la actividad delictiva, hay más de 14 millones que están empleados, y otros cuatro millones tienen o están montando su propio negocio.