Jueves 15 de diciembre de 2011, p. 41
San Cristóbal de las Casas, Chis. El ex gobernador Pablo Salazar Mendiguchía acusó a las autoridades del penal de Huixtla, donde está preso desde el 16 de agosto de segregarlo e impedir que dirigentes sociales, políticos o empresariales lo visiten. En una carta dirigida al pueblo evangélico de Chiapas, añadió que tampoco han permitido que lo visiten pastores y advirtió a sus correligionarios: ¡Que no los engañen, queridos hermanos: soy un preso político!
El ex mandatario (2000-2006) fue detenido el 7 de junio en el aeropuerto de Cancún, Quintana Roo, acusado de peculado por 104 millones de pesos e internado en el penal de El Amate, municipio de Cintalapa, de donde fue trasladado al reclusorio de Huixtla. Hasta la semana pasada le habían sido dictados cinco autos de formal prisión por diferentes procesos.