La Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados decidió dar por terminado el proceso de elección abierta de tres consejeros electorales, y sustituirlo por uno de selección cerrada, en la cual el PRI propondrá dos candidatos, luego de que el PRD aceptó ceder una posición en el Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE), a cambio de presidir la mesa directiva.

Sin embargo, la elección de un perredista como titular de la mesa directiva está acotada a que sea Alejandro Encinas, como quiere la bancada priísta, pero dentro del PRD la corriente de los chuchos –que es mayoría– insiste en que sea Guadalupe Acosta Naranjo.

Más aún, la Junta de Coordinación consideró que en el orden del día de la sesión del jueves primero se incluya la elección de los tres candidatos a consejeros que presenten los partidos y después la elección de la mesa directiva. En ese caso, si persiste el diferendo interno en el PRD, el PRI incluso prevé alegar la falta de consenso, para mantener en el cargo a Emilio Chuayffet.

Ayer el PRD emitió la convocatoria para el registro de aspirantes a la presidencia de la mesa. De acuerdo con las bases, suscritas por el presidente de debates de la bancada, Gerardo Leyva Hernández, el registro de aspirantes será hoy de 9 de la mañana a una de la tarde.

Los candidatos deberán designar a un representante ante la mesa receptora de votos, donde los perredistas depositarán su sufragio de 13:30 a 15:30 horas en las oficinas de ese partido en el sótano, y los resultados se conocerán inmediatamente al terminar el cómputo respectivo.

Debido al jaloneo entre las corrientes, el coordinador de la bancada del sol azteca, Armando Ríos Piter, convocó a Encinas y Acosta Naranjo a una reunión en el restaurante Los Cristales, este lunes al mediodía, para tratar de llegar a un acuerdo. Al terminar el encuenro informó que la candidatura a la mesa directiva de la Cámara dependerá de un pacto entre ambos personajes, que permita garantizar condiciones de unidad y una presencia sólida en la gobernabilidad de ese órgano legislativo.

Respecto de los consejeros, aun cuando el límite del periodo de sesiones no permite un proceso abierto, como el convocado en septiembre de 2010 para elegir candidatos entre expertos que presentaron su solicitud, Ríos Piter alegó que la selección dependerá de los abanderados que cada partido presente.

Hemos buscado que el IFE no se partidice, sino que los consejeros sean personas de alta calidad moral, de intachable trayectoria profesional y, sobre todo, no sean correa de transmisión o de sujeción a la voluntad de un instituto político. Lo que queremos evitar es la lógica de cuotas, declaró.

Sin embargo, una vez que el pleno de la Cámara apruebe el punto de acuerdo de la Junta de Coordinación para declarar desierto el proceso anterior, se propondrá que sean los grupos parlamentarios los que definan unilateralmente la terna. Así, se abrirán dos días de negociación, con la finalidad de que las bancadas se pongan de acuerdo en una lista para ser entregada en la sesión ordinaria del jueves.

Esto, bajo la lógica expresada por Ríos Piter de que la Junta de Coordinación tiene atribuciones que le da la Constitución y la Ley Federal Electoral (sic) para definir el formato, presentarlo al pleno y tener tres consejeros o consejeras.

Al declarar cerrado el proceso, los diputados desecharán la lista de 14 candidatos que aún quedaban de la relación original de 17 presentada por la Comisión de Gobernación, y sobre la cual los partidos no lograron un acuerdo. A pesar de ello, los partidos todavía podrán elegir un aspirante de esa relación o de los 135 que se inscribieron en septiembre del año pasado.