En el contexto del tercer encuentro de la red nacional de municipios que organizó el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), su titular, Juan Miguel Alcántara Soria, aseguró que quienes se han encargado de realizar los diagnósticos para la prevención de la violencia en los más de 2 mil municipios que hay en el país están haciendo trampa, pues han entregado el mismo diagnóstico a las diferentes localidades, y en los documentos sólo cambian el nombre del municipio, pero el resultado es el mismo.

Hemos detectado problemas; no es necesariamente corrupción, a lo mejor descuido o atención no suficiente. Por ejemplo, hemos encontrado que en algunos dictámenes sobre prevención del delito en municipios son los mismos diagnósticos y nada más le cambian el nombre de la localidad, refirió.

Añadió que lo diferente “está sólo en el inicio del documento y en el resto estamos hablando de otro municipio; entonces algún ‘vivo’ está cobrando por hacer el mismo trabajo a los municipios en algo que no está hecho a la medida, las necesidades y la realidad concreta de cada municipio”.

En el Casino Militar de Campo Marte, y ante una escasa presencia de presidentes municipales, Alcántara Soria añadió que por ley, para el próximo año, una parte de los recursos del subsidio para la seguridad municipal deberá estar orientada a la prevención, incluyendo la participación ciudadana en la prevención del delito.

En el mismo acto fue entrevistada Laura Carrera Lugo, ti- tular del Centro Nacional de Prevención del Delito y Participación Ciudadana del SNSP, quien comentó que algunas entidades en las que se ha detectado el fenómeno denunciado por Alcántara Soria son Nuevo León, Yucatán y el estado de México. Sin precisar el número de irregularidades detectadas, la funcionaria explicó que el órgano de la Secretaría de Gobernación ya está revisando el tema, aunque admitió que podría tratarse de un fraude.

Pedimos a cada municipio informarnos con quién habían contratado sus proyectos y quiénes eran los coordinadores de los mismos. A partir de esa información pudimos justamente detectar que hay empresas que aparentemente venden equipo y están haciendo diagnósticos, trabajos con niños y mujeres, y planes municipales; es decir: de chile, de dulce y de manteca, indicó Carrera.