Viernes 25 de noviembre de 2011, p. 28
Estrasburgo, Francia., 24 de noviembre. Los dirigentes de las tres mayores economías de la zona euro –Alemania, Francia e Italia–, Angela Merkel, Nicolas Sarkozy y Mario Monti, se comprometieron a defender la perennidad del euro
sin tocar el Banco Central Europeo (BCE), aun si modifican los tratados del continente, como pretendía Alemania.
Francia y Alemania harán propuestas en los próximos días para cambiar convenios de la Unión Europea y mejorar la gobernanza de la zona euro y la convergencia de las políticas económicas
, anunció Sarkozy al término de un encuentro tripartita para acelerar
el plan de rescate de la región y tranquilizar los mercados.
Queremos un euro fuerte y estable y estamos dispuestos a defenderlo con todas nuestras fuerzas
, comentaron los dirigentes en rueda de prensa. Berlín, París y Roma integran –en ese orden– las tres principales economías de la eurozona.
La modificación de los tratados europeos es una de las exigencias de Alemania para reforzar la disciplina presupuestaria de los 17 países de la zona euro y frenar el contagio de la crisis de la deuda soberana a otras naciones, en particular Italia y España. Ese punto y el papel del BCE, que Francia insiste en ampliar, son los dos asuntos más polémicos entre Berlín y París.