El pueblo zoque de San Miguel Chimalapa, Oaxaca, no permitirá la creación de un municipio chiapaneco en su territorio y está dispuesto a dar la vida por sus tierras, bosques y selvas, advirtió Alberto Cruz Gutiérrez, presidente del comisariado de bienes comunales.

La creación del municipio, aprobada por el Congreso de Chiapas, afectaría al menos 15 mil hectáreas que disputan habitantes de comunidades reconocidas como ejidos por Cintalapa de Figueroa, Chiapas.

Los chiapanecos dicen que están en su tierra, pero ¿cómo va a ser, si se han metido más de 25 kilómetros en nuestras tierras y en territorio del estado? El pueblo zoque está preparado para luchar contra la intromisión chiapaneca porque su territorio no se regala ni mucho menos está en venta, indicó.

Cruz Gutiérrez dijo que Santa María Chimalapa también se sumará a la lucha porque el gobierno chiapaneco pretende crear tres municipios en aproximadamente 40 mil hectáreas de sus tierras. Seremos uno, apuntó.

El gobernador Gabino Cué Monteagudo aseguró que su administración no consentirá la creación del municipio chiapaneco y adelantó que presentará una controversia constitucional por invasiones al territorio oaxaqueño.

Vamos a hacer lo que legalmente corresponda de la mano con los Chimalapas, asentó, y pidió al gobernador de Chiapas, Juan Sabines, actuar con responsabilidad para solucionar el conflicto.

En la ciudad de México, la comisión de observación que el pasado fin de semana acudió a la zona en conflicto rindió un informe que recogió declaraciones de comuneros de Oaxaca antes de que el Congreso de Chiapas aproba crear el municipio de Belisario Domínguez.

En el reporte, los comuneros de San Miguel y Santa María Chimalapa aseguraron estar dispuestos a negociar directamente con ejidatarios de Chiapas sin la intervención de los gobiernos estatales y federal.

Acusaron a la administración de Chiapas de crear tensión con el envío de policías y la creación del municipio de Belisario Domínguez, y al gobierno de Oaxaca de mantener una posición pasiva y omisa.

Sostuvieron que las autoridades estatales y del gobierno federal están orillando a una confrontación a los comuneros oaxaqueños y ejidatarios chiapanecos.