En la mesa de negociación entre el gobierno federal y el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) se discute la posibilidad de que sea el gobierno capitalino el que dé empleo a los trabajadores que se hallan en resistencia desde hace dos años, cuando un decreto presidencial dio por concluida la operación de Luz y Fuerza del Centro (LFC).

La propuesta inicial es que los integrantes del SME atiendan las 26 zonas críticas de la capital del país en materia de suministro de energía eléctrica, principalmente redes aéreas y subterráneas, así como deficiencias de mantenimiento en puntos específicos, como el Aeropuerto Internacional, el Centro Histórico, escuelas, hospitales, dependencias públicas y mercados, entre otros.

De prosperar este proyecto, en los próximos días se definiría si los electricistas pueden ser contratados directamente por el gobierno (federal o local), quienes estarían integrados a una nueva paraestatal para atender, además, la operación de la fibra óptica en el Distrito Federal.

A menos de un mes de que concluya el plazo para encontrar solución al conflicto iniciado el 11 de octubre de 2009, con la extinción de LFC, el SME tiene la encomienda de desglosar las capacidades de los 16 mil 599 trabajadores que no han cobrado su liquidación.

El cálculo inicial es que de ese total, entre 10 mil y 11 mil pueden hacer actividades propias de la mano de obra calificada.

En ese análisis, realizado en las mesas de diálogo de Gobernación, también está la posibilidad de que el gobierno capitalino obtenga una concesión para operar una red pública de telecomunicaciones sustentada en la fibra óptica.

Hay varios escenarios, comentó en entrevista el dirigente del SME, Martín Esparza: El Distrito Federal genera entre 28 y 29 por ciento del producto interno bruto; tiene 3.5 millones de usuarios de energía eléctrica y por su densidad demográfica se convierte en un área muy compleja para la operación de las redes de transmisión y distribución, tanto aéreas como subterráneas. Entonces, para el tamaño de las obras que se requieren en la capital, caben los 16 mil 599 trabajadores en resistencia.

–¿Cuántos podrían obtener empleo?

–La verdad es que caben todos; vamos a ver el tema operativo y administrativo. Además, tenemos un plus que están planteando en la mesa (de Gobernación), que consiste en que den al Distrito Federal la concesión de una red pública de telecomunicaciones que permita explotar la red de fibra óptica que ya está instalada, para servicios de voz, datos, imagen e Internet. Hay una gama importante de actividades que pueden desarrollarse con la fuerza de trabajo que está en el sindicato.

–¿Bajo qué modalidad serían contratados?

–Esa parte se va a abordar en los próximos días; nosotros planteamos que debe ser mediante la creación de un organismo, de una paraestatal para el Distrito Federal o regionales.