El juez federal David Cortés, titular del juzgado décimo cuarto de distrito en materia administrativa, concedió a la farmacéutica trasnacional Pfizer una suspensión definitiva que impedirá por tiempo indefinido que otros laboratorios puedan fabricar genéricos de sildenafil, sustancia activa del medicamento contra la disfunción eréctil conocido comercialmente como Viagra, revelaron fuentes judiciales.

Esta resolución mantendrá congelada la expedición de los permisos para genéricos durante todo el tiempo que dure el juicio para determinar si la actuación de las autoridades sanitarias en este caso ha sido legal.

Viagra reportó a Pfizer en 2010 ventas por más de 53 millones de dólares en México.

El 6 de octubre, el mismo juez concedió a la farmacéutica una suspensión provisional para que la Secretaría de Salud y la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios se abstengan de otorgar permisos para la fabricación de genéricos a partir del sildenafil. Ahora la suspensión es de carácter definitivo.

Fuentes de la Secretaría de Salud informaron a La Jornada que el periodo de 20 años de exclusividad de Pfizer (por uso de patente de marca en este caso sildenafil) venció en junio.

En la demanda de amparo de Pfizer destacan 12 laboratorios como terceros perjudicados, es decir, se trata de empresas que ya habían presentado solicitudes formales a las autoridades sanitarias para iniciar la fabricación de los genéricos de sildenafil.

Entre los laboratorios interesados están Liomont, Siegfried Rhein, Pharmagen, Ranbaxy México, Serral, Laboratorios Grin, Protein, Laboratorios Corne, Sandoz y Laboratorios Alpharma.

Algunos de éstos son filiales de farmacéuticas globales que compiten con Pfizer, como Sandoz, que pertenece a la firma suiza Novartis, o Ranbaxy, que es la mayor productora de genéricos de India.